@Cameron Burrell: Hm... -Sonrió moviendo el trasero con lentitud contra ese visible bulto que se le había formado al masculino, mientras giraba el rostro para besarle la mejlla a su novio. -Usted es un conejito goloso. Deslizaba el caliente cuerpo contra el de él, de manera provocativa y erótica.

Aquella tentación era brutal tanto que la temperatura de aquel hombre se elevo a niveles desproporcionados, de inmediato, camino desde la entrada de la recamara hasta la cama, aun vestido de etiqueta pues recién regresaba del trabajo, al llevar coloco las rodillas sobre el colchón, colocándose exactamente detrás de ella, elevo las manos lo suficiente para que esas falanges apretaran esas dulces tetas que su novia tenia, al mismo tiempo que ella misma restregaba ese trasero perfecto contra la pelvis masculina que pronto se elevaba en calentura.
"Ñom... usted es una culoncita deliciosa."

@Cameron Burrell: Obviamente, Sir. -Menea el traserito estando de rodillas en la cama de ambos, recogiendo el cabello en una coleta con las manos; al mismo tiempo que le dedica un guiño juguetón.

Buenas tardes ese culo es mio. Gracias por su atencion.