« Back to Album · Next »
A sus órdenes, Goshujin-sama. ~
 
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
Caster le dio sorbos a su té matutino al tiempo que veía a su ama danzar con alegría enfundada en aquel traje de maid que consiguió de la vieja costurera; en opinión de la mayor, su ama no debía portar algo así al ser una princesa, aunque su sonrisa valiera la falta.

Cuando la dragona apareció y comenzó a demandar alimento, Caster se levantó con parsimonia y sonrió. —Yo te atenderé. Mi ama no es ninguna sirvienta —se encaminó entonces hasta la mesa de aquel hostal y tomó una de las bandejas de desayuno—. Tratemos de mantener esto en calma para nuestro líder. ¿Sí?
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment