Pᴀʀғᴀɪᴛ ¡Fᴇsᴛ!
NotesThe Whiteboard is a place where people can send Gestures, Attributes, Images, Comments, and much more...
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
Annaw · 22-25, F
•Una noche en una ciudad lejana sin nombre pues da igual el lugar cuando vive durante mil vidas humanas las mismas que es necesario quitar para prevalecer.
Envuelta en la oscuridad de la noche, cual cazador que asecha a su presa, se escondía entre la penumbra…los latidos de su presa un sonido tintineante, le seducían, podría danzar ante aquel sonido le hacía olvidar el ruido exterior, tras tres cuadras atrás solo le seguía a espera de una oportunidad, lo miro atenta ¡que repulsivo era su aspecto! incluso su olor agrio, no tenía un dejo de decencia, churretes de suciedad surcaban su rostro abotargado y su cuello ,sus labios y garganta resecos por la sed se resentían ante aquel pensamiento.
-¿Me gustaría morderlo? ¡Qué diablos es solo un saco de sangre! ¿Por qué tentar a mi suerte? -Ya es tarde para cambiar entonces cuando escruto su mente vagos recuerdos de muertes, unas caras pálidas, débiles, mujeres gritando, sangre en sus manos -¿un desorden mental?- No, esto no era por remordimiento era por placer. El placer de quitar la vida, de causar caos ¡Oh, Dios mío santo! ¿En que estaba pensando cuando elegí cazara este, cuando el mundo bajo las estrellas está lleno de bestias más astutas y depravadas? Quiero llorar. Pensaba mientras le observa…
Pero entonces llego el momento estimulante . La presa había visto una más para él, una sonrisa curvo sus labios se sentía hoy el ángel que custodia aquel que está en peligro, pensamiento sin sentido pues eh causado tanta muerte atreves de los siglos, era algo que no le causa remordimiento jamás a repudiado lo que es se destino es este y goza de él. Tras un instante regreso a sus pensamientos a los de su presa al fin una oportunidad un callejón oscuro por donde el cazador se siente a gusto, pero yo aún más, cual brisa de invierno cruce por un lado del justo ante de que el atacara a su presa, la mujer solo corrió alejándose y mi mano sujeto aquel des dejó de hombre mi mirada se fijó en sus ojos , lo tomo de un tiron agarrándolo por el cuello de su camisa, aquel desgraciado asesino de ancianos y débiles apenas lograba moverse llevo su diestras hasta su cabeza cerro los dedos en su cabello grasiento y lo mantuvo quieto acerco sus labios a su cuello y sus colmillos perforaron su piel y notando como se ponía rígido como si los mismos estuvieran llenos de veneno .La sangre inundo su cerebro y aprecie como electrizaba las venillas de el rostro. Notando el latir hasta los dedos y experimento el calor ardiente, cosquilléate, descendiendo por su espinazo, tragó a trago, él liquido rojizo la ponía en transe quizás era el único momento en el que le hallarían con la defensa baja.
Tras deleitarse de aquel saco de huesos sonrió arrojando el cuerpo sin ninguna consideración dentro de un bote de basura, con suerte lo llevarían por la mañana a un tiradero donde será carcomido por las ratas e insectos, volteo la mira dirigiéndola hacía cada punto de la calle pues sentía claramente la presencia de alguien. •
-Sal ya ,no hay necesidad de esconderse más, sé muy bien que estas ahí -
Envuelta en la oscuridad de la noche, cual cazador que asecha a su presa, se escondía entre la penumbra…los latidos de su presa un sonido tintineante, le seducían, podría danzar ante aquel sonido le hacía olvidar el ruido exterior, tras tres cuadras atrás solo le seguía a espera de una oportunidad, lo miro atenta ¡que repulsivo era su aspecto! incluso su olor agrio, no tenía un dejo de decencia, churretes de suciedad surcaban su rostro abotargado y su cuello ,sus labios y garganta resecos por la sed se resentían ante aquel pensamiento.
-¿Me gustaría morderlo? ¡Qué diablos es solo un saco de sangre! ¿Por qué tentar a mi suerte? -Ya es tarde para cambiar entonces cuando escruto su mente vagos recuerdos de muertes, unas caras pálidas, débiles, mujeres gritando, sangre en sus manos -¿un desorden mental?- No, esto no era por remordimiento era por placer. El placer de quitar la vida, de causar caos ¡Oh, Dios mío santo! ¿En que estaba pensando cuando elegí cazara este, cuando el mundo bajo las estrellas está lleno de bestias más astutas y depravadas? Quiero llorar. Pensaba mientras le observa…
Pero entonces llego el momento estimulante . La presa había visto una más para él, una sonrisa curvo sus labios se sentía hoy el ángel que custodia aquel que está en peligro, pensamiento sin sentido pues eh causado tanta muerte atreves de los siglos, era algo que no le causa remordimiento jamás a repudiado lo que es se destino es este y goza de él. Tras un instante regreso a sus pensamientos a los de su presa al fin una oportunidad un callejón oscuro por donde el cazador se siente a gusto, pero yo aún más, cual brisa de invierno cruce por un lado del justo ante de que el atacara a su presa, la mujer solo corrió alejándose y mi mano sujeto aquel des dejó de hombre mi mirada se fijó en sus ojos , lo tomo de un tiron agarrándolo por el cuello de su camisa, aquel desgraciado asesino de ancianos y débiles apenas lograba moverse llevo su diestras hasta su cabeza cerro los dedos en su cabello grasiento y lo mantuvo quieto acerco sus labios a su cuello y sus colmillos perforaron su piel y notando como se ponía rígido como si los mismos estuvieran llenos de veneno .La sangre inundo su cerebro y aprecie como electrizaba las venillas de el rostro. Notando el latir hasta los dedos y experimento el calor ardiente, cosquilléate, descendiendo por su espinazo, tragó a trago, él liquido rojizo la ponía en transe quizás era el único momento en el que le hallarían con la defensa baja.
Tras deleitarse de aquel saco de huesos sonrió arrojando el cuerpo sin ninguna consideración dentro de un bote de basura, con suerte lo llevarían por la mañana a un tiradero donde será carcomido por las ratas e insectos, volteo la mira dirigiéndola hacía cada punto de la calle pues sentía claramente la presencia de alguien. •
-Sal ya ,no hay necesidad de esconderse más, sé muy bien que estas ahí -