Rascó su mejilla, inflada por el caramelo, al escuchar su pregunta. Tenía una noción básica, pero nunca había preparado pastel.
—A ver, aquí dice... Harina, leche, azúcar glass, huevos... levadura, esencia de vainilla, chispas de chocolate... Hmm... —buscó la receta, después reprodujo el video en la página que detallaba la preparación.
—No se ve taaaaan difícil... ¿Te gustaría intentarlo? —dudó al hacer la pregunta, sabía que podía arrepentirse. [?]
—Hasta la duda ofende...— Su concentración en los dulces virtuales hizo que no notara la paleta, se la habría quitado desde el inicio de haber sido así. Tomo el dulce, sin demorar mas lo abrió desacomodándose del lugar luego lo llevo a su boca, cuando esto ocurrió, volvió a abrazarlo.
Ya tenia que hacerlo como él, sacando la paleta para poder hablar, aun que en ese caso seria para quejarse.
—¿Y como se hace un pastel?— Ese era el detalle que odiaba de los videos, nunca mostraban lo difícil. —Son videos trampa que no te explican nada... Pero ponlo.— Masoquista le dicen a veces. (?)
—¿Quieres una paleta? —preguntó, un poco sorprendido de que ella no le haya pedido antes. [?] De la manga de su camisa, cual acto de magia, hizo salir el dulce y le sujetó en sus dedos. Quedó la paleta próxima al rostro de Liv, pues su brazo seguia rodeando ambos hombros ajenos, más fácilmente ahora que ella le había abrazado.
La mano contraria operaba la tableta, dispuesta en su regazo, y sacaba la paleta de la boca propia cuando fuera necesario decir alguna tontería. [?]
—Mira este, "5 recetas fáciles con sólo 3 ingredientes"... sólo se necesita mantequilla, azúcar, y un pastel... [?]
—¡Mi progreso!...— Se rindió con el juego y gastar dinero ajeno. Suspiro dejando ir con su aliento todas las frustraciones del juego. —Esa última frase... Te hizo sonar muy inteligente. Que miedo. (?)
Ya más calmada se recargo de mejor manera sobre el contrario, ya que ella no manejaría la tableta, se dio la libertad de abrazarlo cuál almohada.
—Ponlo, a ver si salen nuevas recetas que nunca quedan igual. (?)
—... —se anticipó a eso y presionó el botón de "Cancelar" antes de que ella pudiese siquiera terminar de hablar. Movió el dulce dentro de su boca por unos momentos antes de volver a sacarlo, a fin de hablar.
—Si compras más vidas pasará lo mismo, y cuando pase sentirás las ganas de comprar más. ¿No lo ves? A veces la única manera de ganar, es no jugar —cerró la aplicación. De hecho, mejor la borró... a todo esto, ¿cuándo la instaló? [?]
—Es tu mala suerte, tu tienes paleta, yo no... (?)
Justifico toda su vida en una simple frase y echándole la culpa. Cuando entendió lo que era el juego y su maldad para hacerte comprar, asintió. Vio como jugó y ganó esos dos juegos, decidiendo el camino fácil que le había enseñado.
—Entonces debo comprar más vidas ¿Verdad?— Fue lo que entendió. Ya estaba a punto de volver a presionar el botón de compra, solo le hacía falta confirmación.
—No es cuestión de suerte —sacó una paleta sabor capuccino, la metió a su boca tras quitar el envoltorio. Sustituyendo al tabaco, recurría a ese dulce cuando estaba con alguien a quien el humo pudiera incomodar.
—El juego detecta que recargaste vidas, te tira dos niveles fáciles para subir tus humos y que sientas que fue una buena compra. Luego, un nivel complicado, que mantenga tus ánimos bajo control, y a la vez te haga querer seguir intentando y gastar las vidas. Te digo, es todo manipulación.
Volvió a meter la paleta a su boca, habiendo extraído ésta para hablar. Siguió jugando, perdió una vez más, y luego completó dos niveles de corrido.
—¿Ves? La moraleja es que nunca gastes dinero en videojuegos. [?]
—Aja aja...— Asintió a cada consejo como si se tratara de un tema de matemáticas. Parecía que si tenía algo de profesor después de todo.
Estaba sorprendida de la facilidad con la que ganaba y ella que había jugado por horas no había logrado pasar ese nivel. Intento jugar como le dijo, pero en su mala racha perdió casi de inmediato.
—. . . Me pasaste tu mala suerte.— dijo esto ya con el sonido que hace el juego cuando pierdes.
Dejó la tableta sobre el regazo propio, un brazo rodeando los hombros de Liv y el otro, libre, usándolo para jugar.
—Mira, si comienza un grupo muy obvio debajo, es que vamos a ganar. Es obvio que pasaría ahora porque recién compramos vidas, así que van a recompensarnos y hacernos sentir bien. Este juego te manipula, te digo [?]
Y como dijo, el nivel que anteriormente había sido difícil, ahora lo había completado sin mayor contratiempo. El siguiente también, gracias a la "bendición" otorgada por la tarjeta de crédito. [?]
—¿Eh...? ¿Qué?— Le regreso una mirada inocente, como si ella no hubiera comprado ni hecho nada con la cuenta.
Quedo apretada antes de poder moverse, por lo que sólo se acomodo al ponerse de lado. Sin permiso previo, se metió bajo el brazo de su intruso para poder ver la pantalla.
—Apuesto a que pierdes. (?) No tengo pruebas, pero tampoco dudas.
