-Claro que puedes ver... Pero no me hago responsable de lo impactante que son algunas fotos- Extendió los expedientes en la mesa para poder visualizarlos mejor, acomodandolos por grupos entre urgentes, más urgentes y los que tenía que revisar a más tardar esa misma noche -Fuuu... de verdad no quería trabajar tanto el día de hoy pero bueno, las mafias decidieron que no debía dormir está noche...- Saco un cigarro para relajarse un poco pero antes de prenderlo miro a su contrario -¿Quieres uno?... Me sirve para concentrarme así que, quizás te ayude a ti... -
Sin embargo recordó se pronto lo que el otro previamente le menciono y dijo finalmente -Creo que nos ayudaría a conversar un poco mejor... En fin, no te distraigas y coméntame, ¿Que querías decirme?-

Woah. ¡Nunca te había visto con tus casos! ¿Puedo ver? - Exclamó como un infante, curioso y dejó un momento su postura de tranquilidad. Iría hasta donde él, aún si él no había respondido quería poder verlo en acción, era como una oculta y pequeña fantasía.
- Solo he visto alguno que otras cosas en urgencias pero no es mi área favorita.

-A... Es verdad, cierto, cierto... Perdón hombre eso de trabajar es horrible- Se sentó en el sillón que quedaba frente a él, aprovechando la tranquilidad de la casa para ponerse a revisar sus casos de investigación -Claro que si... Tu dime con toda confianza, ¿Ocurre algo malo?-

— Pero que dices, Capri. Recuerda que soy cardiólogo. Entonces que sea un vago no significa que no lea. — Soltó una risa, entendiendo su humor de inmediato. Sintió un poco más que gusto de verle, tenerle cerca siempre sacaba su lado más maduro y así mismo calmado.
— Tengo algo que preguntar. —

-Si sigues leyendo de esa manera compensaré a pensar que eres decente hombre- Dijo en tono de burla amistosa, en realidad sólo estaba algo aburrido y le gustaba ver al gatito tan concentrado.