¡No!- exclamo sonrojada pues era cierto lo que decia, ella siempre le hacia caso a su padre ademas era vigilada por Timon y Pumba, pues ella no tendria por que estar en ese lugar, en las lejanias, pero aun asi no se queria ver insegura frente a el.

¡Ja! ¿Y haces lo que tu "papi" te dice? Qué patética... -Soltó el cachorro, enderezándose al darse cuenta de lo fragil que aparentemente era aquella cachorra, mirándole con una ceja arqueada.

Nadie... Pero mi padre dice que jamás le de la espalda a un forastero ni confirmar en el- la pequeña leona se pone a la defensiva rodeando a el contrario cuidando de tenerlo siempre de frente y no perderlo de vista. Estaba nerviosa pero no lo mostraría.

¿Y quién te preguntó a tí, niñita? -Le espetó el cachorro de león con furia, tomando una postura defensiva frente a ella. De sus patas, sacó de forma instintiva sus garras, como señal de indignación y dispuesto a atacarle en cualquier momento.

Esa sonrisa burlesca que hace que desconfíe de ti...—lo rodea sin darle la espalda.