—Te comprendo, fue algo muy duro tener que vivir con algo así, es el precio a pagar por querer un mundo mejor y la verdad fuiste uno más al igual que yo.
Tras recuperar la compostura, saca del interior de su pantalón una cajetilla de cigarros Pall Mall, su marca preferida. De el interior de esta saca su vicio para darle una bocanada y ver aquel horizonte que se ve de nuevo sera testigo de una guerra sin sentido quizás, pero el precio del peaje es alto y va a salvar a los que pueda sin mirar atrás y sin remordimientos *
— No es nada que ocultar, no huyo del dolor, ya que es parte de mi camino, Kaoru-san. Sé que entiendes eso mejor que nadie ¿Mmm?
Dijo aquello mientras sus ojos obscuros se posaban en ella, para así dedicarle una pequeña sonrisa mientras aquel cigarrillo se quemaba por entre sus dedos, así que acercando este a sus labios dio una calada y soltó la humareda de tabaco, mientras veía hacia el horizonte. No parecía demasiado afectado por decir lo ocurrido, simplemente era la historia que vivió y no le daba problemas contar esos oscuros días, ya que el camino de la justicia, estaba forrado de sangre y pérdidas.
Tras escuchar aquello quiso comentar algo al respecto, pero con que cara, con que derecho iba a poder opinar si ella hizo algo similar con un allegado ? Llevándose la mano diestra a la cara, se cubre la cara, quedando a espalda de su compañero. *
—Perdón por hacerte recordar algo tan doloroso, a veces hasta yo necesito sacar al mounstro.
Agradeciendo la confianza en decirle lo sucedido en su pasado, pensando que quizás encontró a su igual y por ello son compatibles y lo que haya sido quiso que se toparán para enfrentar lo que viniera. *
— Más de una vez, y no hablo de mi padre. Ese obsesivo merecía lo que obtuvo a las manos de su propio hijo... Hablo de mi mentora, Natalia Kaminski.
Al hablar de aquello hizo un gesto de dolor, su entrecejo se frunció, y en aquel hombre tan falto de sentimientos aquella expresión era extraña, pero claramente recordó haber llorado amargamente su muerte, por ende soltó una humareda y añadió con calma.
— Tuve que destruir el avión en el que iba, para evitar que un virus terrible plagara los alrededores fuera de él....
—Bien, igual puedes preguntarme lo que quieras, aunque quizás no te guste oír mi maldita vida....... Has asesinado a alguien que querías verdad ?
Tras sacar de el interior de su chaqueta una paleta de menta, la cual disfruta pero que también es para poder escuchar acerca lo que tenga que revelarle. *
— Puedes preguntar, y contestaré lo mejor posible.
Dijo simplemente cerrando sus ojos, no era como si usualmente hablase de su pasado o sentimientos, pero ya le había hablado de su familia, ya habían enfrentado a la muerte juntos, por ende se había ganado su confianza en varios aspectos.
—Gracias, al menos tengo una casa donde volver, desde que falleció mi mentor me he enfrentado sola al mundo y a sus riesgos. Eres un tipo duro, pero no egoísta.
Por rara ocasión esbozo una leve sonrisa que no fue finjida ni forzada, si no una que le hizo sentir feliz por un instante.
—Hay cosas que quiero saber de ti, por la mirada que tienes. Viste el infierno y el dolor.
Dirigiendo su mirada a aquel hombre que aunque no lo dice, porque su orgullo lo impide. Lo ve como su igual.
— No tienes nada que envidiar ya, Kaoru-san. Ahora eres mi arma y compañera en el campo de batalla, si necesitas dónde quedarte sólo debes hablar.
Admitió con calma mirándole de reojo, posando sus ojos en los de ella, y pues realmente era un tipo sin sentimientos, excepto cuando se trataba de su familia, por ese motivo admitió.
—Y en cuánto a tu percepción de mí, no estás lejos de la realidad. Haría cualquier cosa necesaria para cumplir mi deseo. Pero no es por razones egoístas.
—Pensé eras un tipo sin sentimientos que solo pensaba en ti, pero al menos veo aún te queda algo de humano. * Tras sentir el viento que sopla suavemente, acomoda su cabello y observa la ciudad que ahora debe cuidar. * —Familia, al menos tienes donde volver, te envidio en ese aspecto Kiritsugu.
