-escucha el audio atentamente, enojandose cada vez mas a cada segundo que pasaba, tomando la caja y lanzandola al suelo con fuerza en lo que dejaba salir un fuerte gruñido- Maldito! Cuando regreses te voy a castrar!
-La caja tenía grabado un audio al momento de abrirse el cual se escucharon las palabras del Almirante diciendo "Hey Vasile, ¿Recuerdas la ves en que me engañaste con medio mundo, me mentiste, permitiste que Hirsch me ponga celos, te pusiste con Velkan y tuviste el descaro de no pedirme disculpas? Bueno, esta es mi venganza. ¿Sabes lo que es eso? Es el corazón de uno de los Máximos muertos, solo lo tomé y te lo envié, aunque creo que ya debe de tener como 4 o 5 meses muerto, espero que no te mueras con el olor. Nos vemos el Lunes. Te amo~ "-
-al segundo de abrir la caja siente un fuerte mareo, sacudiendo la cabeza antes de aguantar la respiracion tratando de distinguir lo que dentro del 'regalo' estaba, maldiciendo internamente a Maximo-
-Al momento en que la caja se abrió, un olor inmundo comenzó a recorrer la habitación. Algo que realmente estaba descompuesto a tal punto de que ya llevaba quizás meses en ese estado tan deteriorado, causa a eso ya no se distinguía que era lo que se encontraba dentro de la caja, solo se veía un pedazo de algo marrón y verde.-
-Asintiendo con la cabeza, sonrió ampliamente de forma muy amable y se dio la vuelta de inmediato.- Nos veremos en otro momento, Lilim. -Musitando suave, se retiró.-
Soy Kaworu Nagisa, tripulante de Yamato, actualmente Magallanes. El Capi me dijo que te deje esto, pero no lo abras hasta que me retire, esa fue mi orden. -Le entrega la caja de metal, al parecer hermética donde dentro escondía lo desconocido.- Vuelvo a repetir la orden, no la abras hasta que me retire.
