¡Claro que sí! Jajajaja -Exclamó dando un salto y estrechandole un poco más- Ahora tendrás que soportarme todos los días

Bien, iremos, prepara la casa, te llega la caballeria de Kiria hahaha

... mientras más gente mejor, mis padres pasan menos tiempo en la mansión que yo y eso que viajo demasiado -Finalmente sonrió, aliviada por qué por fin aceptara- Puedes traer a quien quieras, no te preocupes.

Bien, nos iremos a vivir contigo... aunque tengo un invitado mas, es un zorro un poco... confundido aun -se va disculpando desde ahora-

¡Claro que pueden! La mansión Blanchette es tan grande que podrían incluso tener aún más mascotas si quisieran... -Elevó un poco la voz sin querer y no pudo evitar abrazar al pelirrojo- Vengan, Kiria, no quiero verte más así.

Podemos llevarnos a las mascotas tambien? Son... bastantes... haha.

Podrían venir los dos, alejarse de todo un tiempo... -Insistió, queriendo poder hacer siquiera algo, por mínimo que fuera-

No, no quiero dejar a mi hijo solo, me necesita -suspira tomandole las manos a la menor- Estaré bien...

¿Quieres venir conmigo a Francia un tiempo? -Cuestionó apartando algunos cabellos de su rostro- Solo puedo ofrecerte un lugar tranquilo en mi casa...

Si...? -pregunta sonriendo de forma suave, anque notandose lo afligido que estaba-