Lo que yo se de ese guapo, es mi problema, querida. -dice entre risas- Escuche que eres una asessina con sangre fría, si ya tienes prometido, ya no eres una.
-al ser vestida, empieza a arreglar su cabello delante de un espejo mientras mira la espía en ello- Tu querido prometido tiene un corazón puro ¿verdad? Te ayudó si lo haces sufrir.
-se queda quieta cuando siente el agarro en su mentón mientras la sonrisa sigue visible en sus labios.- ¿Salir? Lo siento pero no soy soltera. Tengo prometido, pero si podemos salir como amigas. -se sorprende cuando siente aquella lengua recorrer por sus labios, aquel acto realmente la toma por sorpresa. Retrocede cuando se libera del agarro y solo suelta un pequeño suspiro.- Si, es de fresa. Te tengo una pregunta. ¿A la que te has referido con el "romper el corazón puro de alguien"?
-la toma de su mentón y se acerca a su rostro- Lo que yo quiero es, salir contigo, hermosa... o...podrias romper un corazón... puro... -lame una vez los labios de ella sonriendo coqueta- Vaya, me encanta el sabor de tu lápiz labial... Hmm...¿fresa? -ríe en una voz baja y se acerca a su cama mientras se le coloca unas ropas luego se voltea hacia a ella-
¿Engañar mis deseos? -pregunta mientras el contacto visual sigue presente entre las dos. También la sonrisa en sus pequeños y rosados labios.- Si que eres una chica hermosa pero por el momento, no puedo ofrecerte mi tiempo para hacer.. sabes tu. ¿Locuras? -la mira fijamente en los ojos cuando el cuerpo de aquella kitsune es tan cerca del suyo.- ¿Qué es lo que deseas lo más?
-la kitsune sonríe de medios labios al ver que la chica entre abre sus ojos al ver su cuerpo desnuda - Que mala eres que no me acompañas, pero no puedes engañar tus deseos a tenerme ¿cierto? -se baja de sobre la cama y camina hacia a ella hasta que se queda cerca de ella- Si te ayudó, querida ¿yo que ganaré?
Eso es muy cierto. Busco algo. -sus ojos se agrandaron cuando la chica mostro todo su cuerpo desnudo. Sus labios rosados hacen una pequeña sonrisa mientras se lame los labios superiores y luego responde.- Gracias por la invitación pero estoy bastante segura de que no la encontraré entre tus suaves sábanas. Me disculpo, pero me temo que necesito declarar tu oferta por ahora. Estoy en contra del tiempo. Entonces, te agradecería que me ayudaras un poco. ¿De acuerda?
-la mujer esta mirando la hermosa chica y sus labios hacen una sonrisa- Yo digo que estas buscando algo, hermosa. Ven aquí y en la cama lo vas a encontrar. -deja caer la manta dejando ver sus senos grandes- Necesito castigar te por entrar solo así en mi casa.
-la chica asiática entra en el habitación sabiendo que no hay nadie en la casa. Entra tranquila para buscar entre las cosas pero se sorprende cuando escucha aquella voz desconocida y con rapidez fija su mirada en ella.- ¿Hmm? -sus labios rosados forman una pequeña sonrisa y se cruza de brazos.- Buenas tardes señorita. Lamento entrar sin tocar la puerta.