-Cabe señalar que, aquel joven pelirrojo tendría varias heridas. cicatrices que, aquella armadura se encargaba de ocultar a la vista pero, hay partes de la misma que no lograban tal objetivo y estas mostraban esas lesiones; más aún aquel traje mágico también estaba dañado.Tras escucharle ríe un poco por su comentario de su lanza, ladea el rostro después de su afirmación-

No es la primera vez que me llaman de esa manera pero, trabajo es trabajo

¿Un mago? Esos siempre eran interesantes. La semielfa dio otra mordida a su manzana, antes de levantarse, mientras con el dorso de su mano enguantada limpiaba sus labios. —A mi me gustan mucho de esas.— Señaló la lanza con la mano en la que llevaba la fruta, sentándose sobre la roca, moviendo ligeramente los pies al no alcanzar el suelo con ellos.

—Soy Kayley, semielfa del clan Sylfaren.— Correspondió a aquél saludo. —Dices que buscas a los elfos nigromantes... ¿Eres suicida o algo así?— Inquirió con verdadera curiosidad, los humanos sin duda eran extraños así que no le parecería raro.

¿huh? Ah, rayos es cierto.. que descuidado. aún asi, el camino conduce a este lugar quizas quizas falta más pasos para llegar a ese objetivo

-se rasca la barbilla, el joven mago león suspira para luego sonreir y tener la intensión de apoyarse en uno de los árboles cercanos a su lugar. observa por unos momentos a aquella joven arquera, iba a presentarse pero entendió que ella quería ver primero aquella lanza mágica que emplea. con el movimiento de su brazo lo apoya firmemente en el suelo de lugar, curiosamente ese movimiento hizo que la temperatura que rodea la zona en donde esta el arma aumentara levemente-

Esta es mi lanza mágica, que a su vez me ayuda a hacer mis conjuros . soy Leon Balthazar ¿cual es tu nombre?

—Si fuera el bosque de los elfos nigromantes ya estarías convertido en un montón de saquitos de carne colgados en la puerta de alguien.— Una ligera risa brotó de los labios de la semielfa, que estaba plácidamente recostada sobre una adecuada roca, con una flecha en su mano, y en la punta de esta una jugosa manzana que mordió, antes de mirar al viajero. Más sus ojos brillaron al ver la lanza que llevaba. Bonita, centellante... y seguramente cara. —Vaya arma que tienes ahí, nuevo amigo.

Hey , ¿este es el bosque de Elfos nigromantes?

-Por la apariencia de aquella muchacha, sin dudas es un elfo . pero, no se ve como alguien de peligro aunque las apariencias pueden engañar. eso, lo sabría cualquier experto quien mantendría una actitud más cauteloza pero él, quien por supuesto sabe todo sobre ello, mantenía una actitud más relajada. portando una armadura mágica eleva uno de sus brazos saludandole de manera amistosa. mientras que el otro sostiene una extraña lanza, una lanza que emana un poder mágica-