- Los baños fueron un exito para los niños. Ademas, Nualla podia controlar el agua muy bien, asi que ambos crearon un sistema de drenaje eficiente. Ahora resultaba que eran mucho mas limpios que el resto del pueblo. Llego un momento donde los niños despues de bañarse ya no querian su vieja ropa, asi que las hermanas cosieron trajes nuevos. Todos lucian diferentes, hasta las hermanas y Nualla estaban radiantes, con la piel sana. Apenas vio el cabello brillante y blanco de Nualla quiso llorar. Asi pasaron los dias, ahora los niños tambien traian libros, papel y tinta para sus clases. Hasta...
-se recuesta contra su pecho en cuanto le abraza, cerrando los ojos y asintiendo- Los encontraremos de seguro, no pueden haber ido tan lejos -pero cuando aprieta uno de sus glúteos le golpea el pecho suavemente- Leo! -rie bromeando con aquel regaño, lamiendo sobre sus labios suavente teniendo que ponerse de puntillas- Te llamaré cuando todo esté listo entonces. Mientras tanto, buena suerte con la biblioteca.
