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Buenas noches Kagami

Bueno, el tiempo que te encuentres, es un gusto verte por aqui

Hola Kagami! Cuanto tiempo

Oh! Por eso son los trajes... Para mantener su personalidad en secreto, eso lo explica todo

+el Pelinegro caminaba con la chica tranquilo+

Mmmhhhh no lo creo, ustedes siempre andan con sus maniobra, pero mejor camino
+desciende, y caminaba a su lado+

+El Pelinegro le sonrió, flotando en el aire+

Hola Kagami-chan

Kagami era asi, se exigía tanto que dejaba pasar las pequeñas victorias por una completa, tenía un punto, era amable con el punto en el que casi la alcanzaba pero no le gustaba alardear así que prefirió resaltar las victorias que aunque fueran pocas no carecían de importancia.

— [code]Tienes razón los errores nos hacen mejorar, pero para mí eres la mejor, por lo menos menor que yo.[/code] — Esbozo una sonrisa.




Él la entendía de cierta manera sus padres los presionaban por ser los mejores, pero más aún a Kagami, ella siempre tenía que ser la mejor en todo, la presión en ella por su madre era mayor que la que su padre ejercía en Adrien.

— [code]Salimos temprano, ¿Te gustaría ir por un helado? [/code]

Buscaba distraerla y a él también de sus deberes, tenía tiempo libre hasta que regresará su guardaespaldas a buscarlo ¿y que mejor inversión de su tiempo que pasarlo con su amiga?

Abrió su casillero y tomo la mochila en la cual descansaba Plagg que al movimiento no se inmutó y siguió durmiendo. "Kwami perezoso" pensó el rubio y soltó una risa casi audible, después se giró hacía Kagami sin desvanecer la sonrisa en sus labios.

— [code]No me rechazaras la invitación ¿Cierto?[/code]

Con Kagami era la única persona en la que dejaba la timidez a lado, se sentía bien a su lado, y es que tenían cosas en común y entendían lo que era estar solos, sin amigos. Por ello sus padres eran buenos amigos por qué como ellos tenían cosas en común, aunque era una pena que lo único que compartían eran lo estrictos que eran con sus hijos.

La clase de esgrima termino y Adrien se acercó a Kagami, lo que más disfrutaba de la clase era poder aprender de ella cuando se enfrentaban, era muy fuerte y ágil una digna contrincante y para el rubio era satisfactorio aprender de ella.

Todos iban a los vestidores pero él optó por acercarse a Kagami y se quitó la careta de esgrima dejando ver el rostro.

— [code]Buenos movimientos Kagami.—[/code] Inquirió esbozando una sonrisa.


Era cierto, él era el mejor alumno de esgrima en esa clase hasta que llegó ella y lo superó por mucho, era lo que necesitaba pues aunque no lo mencionara abiertamente Kagami era clave para que los movimientos de Chat Noir fueran más rápidos y fluidos, no solo por los poderes de Plagg el Kwami, si no por el entrenamiento y los enfrentamientos que realizaba con ella.