Si la grosera contestación de Eric lo había alterado bastante, aquel beso fuerte y demandante fue lo que desconectó todas y cada una de las neuronas que trabajaban en su cerebro. ¿Qué mierda había sido eso? Todo había pasado tan rápido que solo lo procesó cuando tenía su adolorido trasero en el piso.

A pesar de la sorpresa, él no era del tipo de personas que se sonrojaba y menos con todo lo que sucedió. Volvió a su rostro neutro y se levantó solo para sentarse en silencio todo el camino, no le tomó importancia la mirada de preocupación de su "mejor amigo" ni a nada más que le pareciera raro, necesitaba distraerse de ello un rato o analizarlo en profundidad o estaría bastante jodido.

Una vez que el bus llegó a su destino no esperó a ninguno de sus aclamados amigos y simplemente se dirigió a la parte trasera de la escuela, a la mierda las clases, como si entrara a esas mierdas de todas maneras.