-Sus orejas se posicionaron otra vez hacia atrás cuando rascó su cabeza, provocando que su instinto felino salga de la peor manera, en forma de tranquilizantes ronroneos a medida que inclinó su cabeza hacia su mano.- Ah... ¿Dormí mucho...?

-Mencionó en tono suave y bastante sumiso debido a las caricias que no paraban de estremecer y relajar su cuerpo por completo. Sus párpados nuevamente se cerraron unos momentos y negó con la cabeza antes de responder a sus preguntas.- Estaba soñando con mis padres. Tuvimos una cena y mi padre se cayó de la silla. Fue divertido.

-El Arcipreste rió divertido, nunca había visto una reacción tan pura como aquella. Rascó su cabeza tratando de sacarlo de aquel embotamiento que le había producido aquel sueño tan profundo.-

Estás en mi regazo, Rho'n... Acabas de dormir una siesta conmigo~

-Trató de hablarle de una forma potente, pero nada estridente, algo que no le fuera molesto para sus recién "despiertos" oídos, sabía lo molesto que podía ser que lo primero que escuchara recién despierto fuera algo desagradable.-

Hiciste caritas muy felices... ¿Que estabas soñando? ¿Acaso se te ocurrió alguna idea para otra arma?

-Estaba plácidamente sumergido en sus sueños, la estaba pasando muy bien en aquel lugar, a tal punto que por fuera pequeñas muecas graciosas se creaban debido a la situación de felicidad. Lamentablemente su sueño fue interrumpido por la voz masculina a su lado. Sus orejas se movieron rápido, repetidas veces, a medida que de a poco fue abriendo sus ojos para verle bastante desconcertado.- ¿Ah...? ¿Qué ocurrió? ¿Donde estoy?

-Jamás había tenido un sueño tan placentero. Lamentablemente no recordaba nada de lo que había soñado. Simplemente abrió los ojos luego de un buen rato de una manera muy perezosa, casi negándose a volver al mundo real Sabía que tenía al chico entre sus brazos, pero estado de sueño le impedía verlo. Quería hablarle, pero sentía su voz ronca y le lastimaba. Aclaró un poco su voz y le habló de la forma mas suave que pudo.- ¿Rho'n? Es hora de despertarse~

-Se sentía raro durmiendo en los brazos de alguien que apenas conocía pero el sueño le venció por completo. Estaba cómodo sintiendo el calor de aquel y más en aquella posición en la que se encontraba. Sabía que al despertar iba a tener un horrible dolor de cuello pero no le importó, se dispuso a dormir a su lado.-

-Los siseos se convirtieron en un suave tarareo apenas audible. Sus musculosos brazos rodearon al joven y lo atrayeron contra su pecho, su objetivo era que esté más cómodo y poder compartirle su calor corporal. Keith también cerró los ojos, iba a acompañarlo a un mundo donde solo podían ir ellos solos, donde ningún tercero podría molestarlos ni dañarlos.-

-De a poco su cuerpo comenzó a relajarse por su suave voz masculina y aquellas caricias que provocaron que sus orejas se acomodasen un poco más hacia atrás y hacia abajo. Poco a poco sus párpados le fueron pesando a tal punto de cerrarse por completo mientras se tomó el atrevimiento se acurrucarse sobre el pecho ajeno, posicionando ambas manos cerca de su torso.-

Ssshh. . . -Le chista de una manera muy suavecita, va prolongando las "S" de una manera muy suave, y cada vez va bajando más el volumen de su voz. Sus manos se cubren de maná y las lleva a sus orejitas, donde empieza a acariciarlas muy suavemente. Era una tactica para hacerlo relajar más. El maná lo ayudaba a llegar hasta sus nervios y relajarlos.-

¿Uhm? -Se deja tomar en brazos como cual felino a medida que posiciona sus orejas hacia atrás para luego mirarle atentamente.- Está bien pero... no puedo dormir sobre ti.

-Ladea su cabeza de un lado a otro negativamente. Lo toma del brazo y lo obliga a sentarse en su regazo.- Te acompañaré en tus sueños... y te haré saber en él cuando es la hora~