K1579212

Despues de muchos años recluida en soledad por voluntad propia, decidió poner fin a su encierro, quería ver los cambios que tuvo el mundo durante su plácido sueño. Asi que, sin duda alguna, abandono su apreciado hogar para sobrevolar largas distancias.

Hacía tanto que no extendía sus alas en el extenso cielo, tampoco había sentido la brisa fría, y era esa sensación la que más adoraba. Como el dragón del viento, siempre fue una criatura libre, podía ir y venir a su antojo, pero con las tantas batallas que se desarrollaron en el pasado, decidió dormir para evitar entrar en más conflictos innecesarios.

En su tan añorado vuelo, puedo encontrar un bosque, uno que no recordaba o conocía, asi que descencio con mucha suavidad. A pesar de su gran tamaño y el color vivaz de sus escamas, no había nadie que pudiera verle. Solo tardaría unos segundos pero el viento rodeo su apariencia de dragon para despues desvanecerse, dejando la figura de una joven de cabellera dorada en el lugar.

Desde muy pequeña, amo la tranquilidad de los bosques. Siempre corria por esos verdes paisajes, sin importar la estación o la hora, solo disfrutaba de todo lo que le rodeaba. Le fascinaba ver los colores danzantes y cambiantes de la naturaleza, a veces verdes, otras amarillas, a veces blancas teñidas por la nieve... siempre era un espectaculo para ella.

Imagino tantas cosas en ese instante, más nunca espero que en esa visita, encontraría un ser tan interesante como la naturaleza que le rodeaba.