-Fornido pelirrojo estrechaba su mano con la del rey mientras aprobechaba para ponerse en pie, una vez de pie este suspiro un poco pues aun le dolia el cuerpo, camino hacia el balcon mirandote cruzando sus fuertes brazos a la altura de su pecho.- Bien lo de las misiones solo fue una de las 3 peticiones que tengo... Auch mierda mi espalda...La segunda es que tu asistas en las misiones dificil, escucho que en tu juventud fuiste un habil guerrero, en el transcurso de unos minutos ese elixir tendria que hacer efecto del todo y regresarte a tu cuerpo de 26 años, asi que si se me presentan batallas duras tu deberas ayudar...-Dijo sin muchos rodeos mientras que la guardia imperial entraba en la habitacion del rey a los gritos y a punta de lanzas y flechas, el pelirrojo los miraba y luego te miraba a ti a los ojos.- La tercer y ultima cosa es que tu hija sea parte de mi grupo, se que sus habilidades sanadoras son imprecionantes y posee habilidad con el arco, la quiero ..

que seguramente su señora esposa debe de estar compartiendo con las otras reinas que poseen gustos similares por consumir todo tipo de artículos caros solo para demostrar la gran cantidad de dinero que poseen*

Pues yo no veo que ese sea el caso al verme en ese espejo pero si me siento con la fuerza y apetito sexual de un hombre de esa edad. Así que debo de agradecerte como corresponde y el deseo que me haz solicitado se te cumplirá *explica el hombre al verse con tantas energías y por eso mismo se apoyo en ambas manos para poder saltar desde la cama finalmente al suelo , quedando parado delante de ese hombre que claramente se ve mucho mas delgado y pequeño que ese imponente Rey. Sin embargo no puede negar que para haber encontrado aquella poción debe de ser un hombre con mucha habilidad* Tienes toda mi gratitud *extiende una de sus manos para sellar el trato que le propuso en un comienzo y se encamino hasta el balcón que tenía en un costado para poder disfrutar del calor del sol una vez mas. Luciendo una expresión de placer en el rostro pero así mismo sintiendo un ardor en su entrepierna, estando ansioso de que su hijastra vuelva de sus clases de modales para recibirle como se lo merece ya

Vengarse de quienes lo estafaron pidiendole esos materiales que hiban desde el craneo de una planta que crece cada 10 años en el fondo de un lago, hasta el craneo de un dragon albino de ojos bicolor, miraba la puerta en todo momento mientras esperaba que los guardias entren, pues las alarmas sonaban con fuerza anunciando una invasion al trono.-
Sabes? Todos buscaban matar a la enfermedad...Es el error que comenten muchos mercenarios, aveces no es necesario matar para terminar el trabajo, yo busque otra salida, ese elixir no matara tu enfermedad, pero si regresara su cuerpo a tu edad de 26 años, de esta manera la enfermedad desaparecera ya que en ese momento no estuvo en tu organismo.

-Pese a su tranquila sonrrisa, en el fondo el pelirrojo estaba bastante preocupado, conocia bien el poder militar de los elfos a los que el humano lideraba, sabia bien que no tendria chances contra tal despliege de militares, sin embargo, como siempre, apostaba el todo por el todo en aquella posion, simplemente camino rengueando levemente hasta sentarse en el suelo, en el lado derecho del rey, solo apoyando su espalda en las maderas de la cama.Saco de su bolcillo derecho una petaca donde se encontraba su delicioso wisky barato de algun bar de por ahi dandole un largo trago, bebiendosela hasta la mitad.- Si te salvas,quiero que toda mision que involucre trabajo sucio de la corona me la des, minimo quiero un trabajo por mes bien pagado. -Mencionaba como primer peticion, lo que mas le podria llegar a joder no es que la posion no funcionase y la nacion caiga en desesperacion a falta de su lider, sino que le jodia haber echo todo su viaje en vano y de paso que lo hayan estafado y no poder v

mientras que su cuerpo finalmente se relajaba. Dejando caer su cuerpo del todo contra una enorme almohada que tenía detrás hasta que siente que todo ese malestar que le afectaba se desvanecía de su cuerpo con una expresión de sorpresa muy marcada en su rostro* Esto de verdad funciono

Eres un joven bastante astuto por lo que puedo ver. Sin embargo creo que no estoy en condiciones para oponerme a tus acciones así que lo aceptaré. Pero debes de tener muy claro que si esa poción llegase a matarte, vas a tener a cada uno de los guardias del reino detrás de tu cabeza *luego de sus palabras el mayor de cabellera albina enseña una blanca sonrisa que refleja la seguridad de su poder militar y por eso se acomoda como bien puede sobre la colcha de la cama para quedar de esta forma sentado. Extiende una de sus manos a aquel y recibe aquella botella con ese fluido de color verde que ya sin pensarlo dos veces , se bebe cerrando sus ojos puesto que su sabor era realmente apestoso* Ahhh....esto es asqueroso ¡¡ *reprocha con la lengua afuera sin sentir nada extraño en su cuerpo durante los primeros segundos y por ende suponiendo que todas sus palabras fueron habladurías nada mas. Pero cuando estuvo apunto de ponerse en su contra , sintió como su corazón empezó a palpitar muy rápido

-Entre las sombras la imagen del pelirrojo mercenario se fue volviendo mas clara, lograndose apreciar su fisico en su totalidad, siendo un hombre de gran altura y fuerte fisico masculino, se podrian ver sus ropajes algo desgarrados, con marcas de heridas en su cuerpo que aun perdian leve sangre, su derecho brazo estaba colgando, totalmente quebrado, por lo que con algo de dificultad abria la gran puerta de madera y hierro.-
Vaya , parece que no soy unico jodido aqui...
-Menciono sonrriendo a medio labio tranquilo, hablandole a la maxima entidad de aquel reino gobernado por elfos y humanos, caminando casi cojeando el hombre se paro frente a la cama del rey mirandole a los ojos directamente.-
Tengo en mis manos la posion que podria curarte, ahora mismo te la dare y si la bebes y te curas debes concederme 3 cosas que te pida que se tienes, si la posina no hace falta, entonces estoy dispuesto a entregarme por invadir tu castillo, estoy algo cansado...Aceptas?

*El mayor se encontraba recostado sobre su enorme cama matrimonial donde llevaba algunos días completamente solo para evitar cualquier tipo de contagio de la enfermedad que pudiese estar sufriendo a su pareja como al resto de personas que vivían en aquel castillo. Justo cuando aquellos silbidos llaman tanto su atención , que lo llevan a abrir uno de sus ojos para mirar hacia la única entrada normal posible que es aquella puerta del costado. Luciendo bastante agitado y con una gran cantidad de sudor que escurre por su rostro con el mas mínimo acto físico posible, deseando que finalmente fuese alguien que lo ayudase*

-La pequeña rubia veia los pasos del caballero hasta los aposentos de su padrastro, ella lo observaba escondida en uno de los pilares del palacio mientras este caminaba a la habitacion aislada del mayor, rogando para sus adentros que este ubiera encontrado una cura para su rey-