« Back to Album · Next »
Nunca había sido muy femenina. Ni de niña, ni ahora. No era como si sus aspiraciones pudieran permitir demasiado espacio para vestidos y muñecas, pues desde muy pequeña sabía que quería convertirse en un caballero sagrado. No le nacía como a Guila, que podía mantener su cabello largo y negro a pesar de llevar la misma labor, el de ella siempre permaneció corto y recogido.
Así que podía decirse que cuando uno de los pecados la conoció y desnudó, su feminidad despertó. Lejos de molestarse por el hecho como aparentemente mostró... Le había gustado. El momento, la intimidad, no podía dejar de...
 
Newest First | Oldest First
Jericho1570453 · 31-35, F
Lanzó su boca hacia la fruta en una feroz mordida, robando un mordisco que terminó por ensuciarle las comisuras con su jugo. - A veces no entiendo el alcance que tiene un pecado capital... -
Ban1560922 · M
— ¿Mapa?, No necesito eso...con mi olfato es más que suficiente, ¿Sabías? Por otro lado, hay variedad de alimentos aquí pero no todos son confiables— Tomó uno de los frutos que cargaba ahí para ofrecerselo a la chica, acercándolo a sus labios para que se alimentara.
Jericho1570453 · 31-35, F
Se congeló en su postura, mientras pasaba de chica a frutero. Eso la molestó, al grado que su transparente rostro reflejó con enrojecimiento su frustración. Sabía que no le gustaba, su indiferencia era clara y podría sentirla a una distancia de kilómetros. Dándose cuenta de lo inútil que sería responder a esa pregunta, tomó la chaqueta de su cabeza y abrazó las frutas, mirando la variedad de la cual podría elegir. — Trajiste mucho. No pensé que ese sitio estuviese tan lejos. ¿Tienes un mapa?
Ban1560922 · M
Su costado fue impactado por ese enfurecido puño, lo que hizo al zorro bostezar con fuerza, así elevó la mano en dónde traía la chaqueta con los frutos y colocarla sobre la cabeza de la chica. — Espera... Según lo que dices, ¿Te gustó que te desnudara?—
Aguardo por la respuesta nuevamente bostezando, vago y sin mucho interés.
Jericho1570453 · 31-35, F
Su burbuja explotó al escuchar sus palabras. Claro que a pesar de todo lo que le gustaba de él, había algo que podía encenderla tan rápido como el fuego a la pólvora... Cuando jugaba con su nombre. Ella se puso de pie de un brinco erizada como un gato. — ¡¿Cómo me llamaste...?! ¡Maldita sea, Ban! — Ella caminó hacia él con pesados pasos nada femeninos, los puños cerrados. — Después de todo lo que hemos pasado, que hemos viajado, peleado juntos, que me has quitado la ropa... Lo que no me desagradó por cierto... ¡¿AÚN NO TE APRENDES MI NOMBRE?! — Descargó su puño contra su costado, lo que sabía sería una cosquilla para el pecado.
Ban1560922 · M
Regreso al lugar en dónde la dejó con la chaqueta convertida en un canasto en dónde traía los frutos.
— Oe.... Jarocho, vamos a dormir aquí—
Ban1560922 · M
Recolectar frutos rojos de un árbol cercano le traía recuerdos un tanto melancólicos, esos días pasados en los que básicamente se moría de hambre y robar se había convertido en una actividad del diario. Soltó un suspiro nasal y continúo con la actividad, sería una buena opción acampar, atrapar un par de peces, encender una fogata y dormir, para el pecado eso era sencillo y pese a que se viera distante y distraído cuando mantenía una mirada opaca muy dentro podía ser algo amable con su compañera de viaje. (...)
Jericho1570453 · 31-35, F
pensar en eso. Eso era lo que estaba en su cabeza mientras babeaba hacia el cielo sentada sobre una roca, mientras Ban había ido a buscar quién sabe qué cosa. Aún viajaba con él de vez en cuando, tan sólo le había dicho "Vamos", y ella sin duda fue.

Add a comment...
 
Send Comment