Su falo se descargó en el interior del japonés, cuando todo su interior parecía que iba a quebrarle en dos debido a esa presión tan intensa a causa de su orgasmo. Bajo las faldas del disfraz de Mioyo, sintió cómo también manchaba su pecho de sus fluidos de amor.
Jaidev respiraba de manera agitada, abrazándole fuerte a Mioyo para que no se cayera. Sus cabellos estaban bañados en sudor, así como parte de su disfraz.
— Fe-Feliz...Feliz Halloween, bebé... — Le decía entre jadeos, sonriéndole.
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-Ha-Hazlo... y-yo tambien...
Responde tragando en seco y aferrandose mas a el, tirando la cabeza hacia atras antes de relamerse los labios, corriendose una vez se siente llenado por el ajeno finalmente
— Mi-Mioyo...Yo...Ahhh...Vo-Voy a correrme pronto...Ugh... — Le decía, teniendo que cerrar sus ojos en ese instante. El placer mezclado con la brusca fricción que ejercía con cada embestida a Mioyo era demasiado satisfactoria para él, pero también que lo era para Mioyo. Le abrazó con fuerza, chocando mucho más fuerte y rápido su hombría en el interior del contrario, sintiendo ese enorme trasero tragarse toda su bien dotada erección, como si en el coito ellos habían caido el uno para el otro.
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-Jay...
Susurra su nombre finalmente, mordiendose el labio inferior y aferrandose con notables ganas a su cuerpo, sintiendose estallar en cualquier momento gracias a la intensidad de todo
— Ahh... Por Dios...Ngh... — Cruzó sus brazos por encima de su cabeza y apoyándose aún en la puerta, embistiéndole con tremendas ganas sin apartar su mirada del castaño.
Agradeció que aquella era la noche de Halloween, por lo que casi todos en la ciudad estaban fuera de sus hogares y, por fortuna, nadie por allí podría escuchar desde afuera cómo ambos jóvenes parecían que iba a quebrar aquella puerta de madera.
Con cada embestida que le ofrecía, los músculos de su pelvis y vientre rozaban la hombría del menor bajo esa larga falda, tomándole sin recato alguno.
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Se da cuenta de que el juego habia terminado, sonriendo ampliamente de verle tan deshecho sobre el, mordiendose el labio inferior antes de abrazarlo mas
- Tomame todo... mi hombre...
Susurra contra sus labios, besandolo en lo que le siente taladrar sus interiores de forma incesante
— Mi-Mioyo...Yo... — No pudo soportarlo más, teniendo que salirse de su personaje y, apoyando sus antebrazos a la puerta hasta tal punto de no dejarle suficiente espacio al joven japonés para "escapar", comenzó a embestirle usando únicamente su fuerte y bien entrenada pelvis. — Su-Sujétate bien...No-No me sueltes... — Le indicaba, golpeteándole todas las paredes internas a su amado, mirándole a los ojos con deseo. — Hah... Pa-Panecito de melón...Mmmm...
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Se termina abrazando al cuerpo de Jaidev para bessr sus labios, sintiendole lentamente entrar en su cuerpo, suspirando lleno de placer y relamiendose los labios con ganas, estaba encantado
Las palabras del menor, así como también sus reacciones ante esos estímulos y el roleplay tan realista que ambos habían llevado, eran cosas demasiado placenteras para el moreno, tanto que se acercó a sus labios para besarlos con pasión y entrega, mientras se introducía lentamente en él en lo que direccionaba la punta de su falo entre esos enormes glúteos, empujándole luego de extraer aquellos dedos.
— Ngh...Mierda... — Tuvo que dejar de besarle para poder respirar y maldecir de gusto, respirándole al oído del menor. — ¿E-Esto era lo que querías, zorra?...
