- Jadeó muy bajo por eso lamida, tratando de mantener el control aunque lo único que deseaba ahora era tomarla y hacerla suya en ese instante. Una fuerte nalgada dejó en el trasero de su pareja y después volvió a hablar-
Musita, jugando con sus palabras al ocultarse en esa zona del cuello donde con gusto seguiria dejando besos lentos hasta una pequeña y traviesa lamida. Rose ríe, pero no dice nada.
- susurró de vuelta, dejando otro beso en la mejilla ajena sin dejar de acariciar su piel. Sonriente se aferró más a ella en lo que sintió su cuerpo estremecerse a causa del beso en esa zona tan sensible -
Las manos de Jade directamente sobre su piel causaban un agradable estremecer en la rubia. Ella le apretó la cintura con las yemas, aferrándose mientras continuaba con esos cariñosos besos por sus labios. De un momento a otro se detiene y sonríe, inclinándose a dejarle un beso pronunciado a un lado del cuello.
- le encantaba seguir hablando en ese idioma, su tono de voz se volvía aún más seductor que en español y eso le daba un plus en el pequeño juego que tenía con su novia. Correspondió entonces el beso recibido, ladeando también su rostro al lado opuesto que el de su pareja para acoplarse mejor a ella en lo que sus manos subían y bajaban con cuidado por la silueta opuesta, metiéndose incluso bajo la ropa ajena para dejar suaves caricias sobre su piel-
Finalmente le responde igual, riendo brevemente ante ese tono tan atractivo en la voz de Jade. Se inclinó a otro beso, más largo y pronunciado, ladeando el rostro para mejor comodidad. Ahora no quería apartarse, brindaría todos los besos que fueran necesarios para dejar contenta a su linda chica.
- preguntó subiendo una de sus manos hacia la roja mejilla contraria, acariciando suavemente para después tomarla del mentón y robarle un nuevo y corto beso, separándose despacio para volver a hablarle en un susurro cargado de coquetería -
Enrojeció, pese a la picardía de la mirada que tenía sobre Jade. Cualquier acto de esas manos era bien recibido, aunque se sorprendió por la rudeza. Ella respondió entonces, lamiendole despacio los labios y llevando una mano a un lado de su cuerpo, en una larga caricia por su cintura.
- no pudo evitar jadear al sentir esa mordida en sus labios, tentada la devolvió aunque un poco más fuerte, apretando incluso un poco más los glúteos ajenos para atraerla más contra su cuerpo -
- Yo amo que respondas en inglés. Qué acento tan sexy...~
Ese par de manos que se atrevían a recorrerla de a poco le hicieron sonreír. Por otro lado, Rose mordió los labios de su linda novia, apoyando un poco mas el peso de su pecho en el suyo.
