« Back to Album · Next »
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
Jacques1567581 · 26-30, M
—Pocas veces, en los menesteres nocturnos y las dádivas pasajeras de la inmortalidad, Jacques se quedaba sin palabras como en ésta ocasión. El Toreador marcó un tempo de duda, ocasionando que su sonrisa -gallada y macabra- desapareciese para ser remplazada con la infantil duda que se presentaba ante él. Bajó sus amarillos ojos hacía la Serpiente de Plata, la única compañera que conocía la lengua de los demonios y la mala suerte de los combatientes callejeros. <<¡Para milonga; yo!>> Sentenciaba la daga, aunque no pudiese hablar, así se la imaginaba diciendo a la opuesta. Un inmortal longevo si, pero el Amoroso era más impetuoso que sabio—.
No te entiendo, Cagmine. Tus ojos dicen que no quiegues vivig, pego me dices lo opuesto... De todos los mogtales... Eges la más strange. No quieges bailag pego tampoco quieges ig a casa.
No te entiendo, Cagmine. Tus ojos dicen que no quiegues vivig, pego me dices lo opuesto... De todos los mogtales... Eges la más strange. No quieges bailag pego tampoco quieges ig a casa.
Add a comment...