-entonó en voz burlona pero con ligera alegría un joven albino con ciertas características de perro y humano, sonrió mostrando sus colmillos mientras caminaba donde la joven -
Así que tu eres la humana qué ha estado causando problemas en mi territorio, solucionare el problema a raíz si no te mueves seré amable causando tu muerte instantánea pero si te opones... Será tan doloroso como tu quieras qué sea
-desenvaina a su colmillo acero, una poderosa arma heredada por medio de su padre la cual siempre estaba a su lado... Cuando aquella espada estaba lejos de su alcanze el yokai se volvía un verdadero peligro para todos pero llevaba años en los que cuidaba no separarse tanto de su arma... Apunto el cuello de la mujer realmente no sabia porque debía matarla no escucho mucho a los humanos era demasiado impaciente como para quedarse quieto escuchando la historia como debia-
Era un día común, Lee había terminado sus deberes escolares y no de la manera más adecuada, pues casi siempre los.chicos de su escuela se metían con él. En la para del bus se detuvo con la ropa mojada, algo de comida en el cabello y un golpe en la mejilla-
