Disparemeee

-Como siempre, el Almirante siempre tan dedicado con lo que concierne su trabajo y responsabilidades, fue claro que aquello le molestó un poco, pero no le dijo nada, solo suspiro pesado y acomodó nuevamente los papeles.- Tengo que terminar esto, me llevará unos minutos nada más...

-Asiente con un movimiento de cabeza- Sí, la llené. -Se estira perezosamente sobre el escritorio, como su estatura era bastante... acotada... cabía estirado ahí, pero eso ocasionó que desparramara algunos papeles- Ya deja de trabajar...

Mh.. -Se volteó unos instantes para verle y seguirlo con la mirada hasta que aquel acortó la distancia tras sentarse sobre el escritorio. No iba a indagar mucho al respecto, pero hasta cierto punto se preocupaba por su pareja, pese a ser una criatura peligrosa.- ¿Ya llenaste la solicitud de examen? Es un cuestionario relacionado al trabajo, nuestra misión, las funciones de cada equipo y reglamentos generales. Es como el examen escrito.

-La sonrisa y el ánimo feliz con el que había regresado, se esfumaron poco a poco- Tsk... -Efecto, además de la pistola humeante, su ropa estaba algo arrugada, su sombrero ladeado y con un agujero- Un poco, nada que no pudiera resolver. -Dejó la pistola sobre una mesa, no planeaba usarla más, y fue a sentarse sobre el escritorio de Máximo- Ya no hay problemas. -Tomó uno de los informes y lo leyó, para después dejar la hoja en su lugar-

-Correspondió el beso como pudo y se resignó, al fin y al cabo no podía ir en contra de los instintos de su pareja. Lo dejó ir y mientras tanto el Almirante se dispuso a terminar los informes de los pedido de examen. Fue hasta su escritorio para tomar asiento y de un instante para el otro, su amado regresó.- Tardaste más de lo previsto. ¿Se te complicó, verdad?

-Sonríe ampliamente y le roba un beso- ¡Claro! No tardaré, ya verás~ -Sin decir más, murmuró unas frases poco comprensibles y desapareció por un portal de múltiples colores, sin dejar rastro. Al cabo de lo que en Iscandar fueron dos minutos, el portal vuelve a abrirse e Indra emerge de él. Su pistola aun echaba humo- Honey i'm home~

-No estaba para nada convencido sobre comer humanos y menos aún de acompañarlo a realizar cosas que van completamente en contra a su código de honor. Negó con la cabeza y suspiró pesado, soltándole y apartándose.- Ve a hacer tus cosas, pero no me cuentes que ocurrió cuando regreses, yo estaré por aquí... terminando unos informes...

También comemos dragones, pero yo prefiero la carne humana... Comemos muchas cosas. -Se encoge de hombros- Pero la carne de criaturas patéticas siempre le genera mayor placer a mi paladar. En fin... ¿Me dejarás ir a hacer mi "trabajito"? ¿Quieres acompañarme?

-Su semblante se transformó a uno bastante serio y molesto hasta cierto punto por sus palabras, no le agradaba que a todo momento le marquen lo amargado y aguafiestas que solía ser. Apenas fue mordido por el otro, frunció su boca hacia el costado en una mueca de desaprobación y agregó.- Creí que comían Dragones.