I1581030 is using SimilarWorlds.
Join SimilarWorlds today »
About Me
About Me
[i]El clan Hendō (変動) se desarrolló a través de la unión de dos pequeñas tribus nómadas de zorros espirituales en los bosques al sur de lo que hoy se conoce como la isla de Kyuushu, en Japón, en principio, su existencia se basaba en la supervivencia y tranquila convivencia con el resto de las criaturas que habitaban cerca de ellos, pero fue su devoción hacia los dioses y el flujo del equilibrio lo que les concedió una enorme bendición.

Cada ciertos años, durante el cambio de generación, nacerían 7 zorros con una afinidad espiritual tan especial que podrían cambiar el curso de las cosas con su sola voluntad. Cada uno tomaría la representación de un concepto importante para proteger y utilizar:


[b]El Pasado (Saigo):[/b] Como guía para no repetir errores, así como fuente de conocimiento infinito de todo lo que ya sucedió, cerca o lejos, propio o ajeno.
[b]El presente (Ima):[/b] Como medio para estabilizar el día a día, sin dejar que lo anterior o lo siguiente tomen mayor importancia, así mismo, la protección de la aldea en general.
[b]El futuro (Mirai):[/b] Como manera de prever los sucesos y prepararse para las calamidades.
[b]Los sueños (Yume):[/b] Como vigía durante el descanso y protección contra las malas intenciones de otros.
[b]El destino (Unmei):[/b] Como camino para garantizar la prosperidad y la felicidad de la gente
[b]La vida (Jinsei):[/b] Como método para garantizar el crecimiento del pueblo.
[b]La muerte (Shi):[/b] Como manera de guiar a las almas de los que ya se han ido para que alcancen la paz inmediata y la tranquila resurrección.

El clan en si era una familia gigante, pero el nucleo principal era conocido como Chūshin (中心) y respetado como la estirpe más influyente, descendientes directos de los bendecidos por las divinidades.

En general la paz reinaba en el clan y sus alrededores, no solían meterse en problemas con otras razas, pero su crecimiento era exponencial e inevitable, las probabilidades siempre estaban a su favor y la envidia eventualmente se alojó en los corazones de aquellos que los miraban desde lejos. Tras muchos años de tranquilidad, finalmente un pueblo en específico se alzó en contra suya y bajo la influencia del odio convenció a otros más de unirse en su cruzada contra los zorros del clan Hendō. La tarea no sería sencilla, puesto que la presencia de los 7 protectores los hacía estar un paso adelante, así que durante varios años planearon su ataque.

El fatídico día que todo aconteció, 7 maldiciones se llevaron a cabo al mismo tiempo al rededor del clan, con el fin de encerrar a los zorros más fuertes, usando sus propios atributos en su contra, cayeron uno por uno, en un orden bien pensado para garantizar el éxito:

A Unmei le cortaron los hilos del destino, encerrándolo en un espacio en blanco sin caminos a seguir.
A Mirai la cegaron del futuro y sumieron su consciencia en la oscuridad.
A Yume lo encerraron en sus propios sueños.
A Ima la sellaron en el limbo entre el pasado y el futuro, sin poder avanzar a ningún lugar.
A Saigo lo atraparon en el pasado, obligándolo a repetir sucesos terribles si poder escapar.
A Shi lo aislaron en el mundo espiritual, donde solo la muerte puede rondar.

En cuanto a Jinsei, el zorro de la vida, simplemente detuvieron su corazón y maldijeron su alma para ser incapaz de reencarnar, puesto que su presencia traería el resurgimiento del clan si el sello de los demás se llegaba a romper. Tras la caída de los protectores, arrasar la aldea no fue tan complicado, aún a pesar de la resistencia opuesta por parte de los zorros, los pocos sobrevivientes tuvieron que escapar, dejando atrás todo lo que conocían, el resto no tuvo otro final que la muerte.[/i]