Aquel bosque era la entrada a una isla protegida de dragones llamada Skye. Era una isla que habia sido protegida por la magia de los ancianos, pacíficos vivían en armonía con todas las especies. Pero todo cambió cuando 2 dragonas dijeron ser descendientes de los dioses, esto provoco una guerra entre los bandos: las dragonas, los que se oponían a ellas y aquellos que simplemente querían vivir tranquilos.

Pocos lograron escapar, algunos sobrevivientes a aquella masacre se quedaron a vivir en la isla escondidos del mundo moderno, fuertes, imponentes y antiguos grandes guerreros que conocían el mas puro estilo de batalla.

A quien atravesaban la el bosque de niebla les esperaban grandes peligros entre estos feroces guerreros y otras criaturas que ahí habitaban y se habían vuelto salvajes y feroces.

Aquella dragón de fuego y oscuridad conocía aquel tiempo en sus tiempos de gloria y a veces se aventuraba a regresar por aquellas tierras a rendir homenaje en el templo olvidado.

En aquel abandonado reino de los dragones se encontraba aquel guerrero metálico de la ira, ya que había escuchado rumores que se encontraban guerreros muy fuertes en aquel lugar y que los guerreros que entraban jamás salía asi que le era muy emocionante aquella aventura