-Mostró una leve mueca de asombro, seguido de una débil sonrisa apenas visible en sus labios; nuevamente él no se equivoca en calificar/evaluar a las personas.- -Gracias, linda. -Responde amable y en susurro.-

-Adivina que el motivo de que ya no quería hablar del tema, era por aquella muchacha. Suspiró e hizo un ademán de dibujar un cierre en su boca y alzar el pulgar en señal de aprobación.- Pierda cuidado, no se lo diré... -Se acerca un poco al hombre invadiendo su espacio personal sin pedirle permiso- Usted es un libro abierto. -Luego se aleja por precaución.-

- No todos tenemos esa suerte querida, y no todos podemos amar, cuando el deseo de ser libre es mayor a comparación del deseo. -Disuadió a la chica, porque no deseaba hablar sobre aquel profundo amor que siente por la cadete Sinclair.-

Ah...que aburrido, ¡Pero si hasta el comandante Dok tiene una esposa e hijitas adorables! me cuenta a cada rato de ellas, es como si las conociera, imagínese que se retira y va a vivir a una casita en el campo y allí lo espera una linda mujer que le sirve sopita caliente y luego se cuentan historias... ¡Eso debe ser el fin de los militares y no ser comida de monstruo. -Hablar de los titanes le causa tanta aversión y rabia que frunce el ceño.-

-Negó instantáneamente.- -No, mi estimada. -Fué su única y noble respuesta que pudo brindarle a la muchacha. Mike no diría nada con mayor detalle de aquel asunto que aún le mantiene en un lecho de pérdida.- -Mi vida siempre ha estado ligada a la Legión.

Espere, ¿acaso ella tiene novio? me imagino que bien oculto si no... -Se coloca el índice a los labios haciendo la señal de silencio.- Seguro para usted hay alguien que lo ama en secreto y le dirá ¡Le amo señor Mike! -Abre los brazos y cierra los ojos.- Así bien romántico.

- ¿Te refieres a la cadete Sinclair? No, mi estimada y noble cadete Dreyse, ella simplemente me ve como un amigo, además ella tiene... -Mordió su labio inferior ante una incómoda verdad que resulta ser lacerante para él.- -alguien más en mente.

Pero... seguro cierta persona se enfadará con usted. -Con eso dio a entender a la otra chica que se fue molesta ya que Mike y ella congeniaron muy rápido.- No quiero causarle problema alguno.

-Parpadeó curioso y sorprendido por el cambio repentino de Hitch.- - D-descuida, no hiciste nada malo. -Comentó amable y con esa humildad palpable en su voz, siempre tan ameno con sus soldados y quienes le rodean.-

-Nota que aún tiene agarrado el brazo del superior así que lo suelta al ver su rostro sonrojado como un tomate- ¡Perdón! ¡Perdón! Soy una boba, superior Mike... no quise hacerle pasar un mal rato, no le diga esto al comandante Dok, me matará.