────¿Fuiste cariñosa conmigo?

Voltea hacia atrás, ya no estaba y piensa en que esa mujer tiene carácter de niña y es muy voluble.

[😓]

────¿Tan rápido anocheció?

Cierra sus ojos y asiente tranquilamente, apenas pueda iré a relevarte porque no quiero que te lleves todo el trabajo.

────Buenas noches, ángel.

No será dicho. Buenas noches Yahiko.

-Le deja un beso prolongado en la mejilla, ya era hora de hacer guardia en las elevadas estaciones de la aldea. Se levanta para desaparecer.-

Después lo hablaremos.

Se queda en silencio observándola con curiosidad.

────Te queda bien el apodo de ángel.

Le responde bajando la voz, el no era de decir cumplidos.

────¿La misma sangre?

-Pasa la zurda por el espaldar ajeno, y recarga la mejilla en su hombro.-

Todo estará bien Yahiko, eres un hombre muy fuerte. Nada te derriba, nada nunca te derribará, y yo te ayudare en lo que pueda. Dentro de nosotros fluye la misma sangre.

Ladea el rostro observándola.

────Son cosas que están lejos de mi comprensión, solo disfrutemos del atardecer como en los viejos tiempos.

¿Nostálgico? no entiendo porque. -Desaparece y reaparece al costado del pelinaranja.-

No es bueno estar así, anímate; hay mucho que hacer.

────No, estoy algo notalgico pero si quieres puedes subir aquí hay espacio.

¿No tenis frío allá arriba?