« Back to Album · Next »
Está usando mis piernas... ~
 
Newest First | Oldest First
User1578325 · 22-25, M
Mientras esperaba, se encontró con un pequeño mono, el cual le había arrojado un coco, gracias a sus indicios de Haki de observación pudo esquivar dicho fruto sin mayor contratiempo, y luego con un pequeño golpe lo partió en dos para así comer de la fruta, estirando su brazo hasta el pequeño animal con la otra mitad.

El coco fue devorado rápidamente, Luffy comenzaba a impacientarse hasta que vio a Hancock y entonces agitó los brazos para ser visible, como si no lo fuera por ser el único hombre en la isla.

— ¿Cómo aprendiste Haki Hancock? ¿Tuviste un maestro sorprendente como Rayleigh? —

La curiosidad del sombrero de paja era notoria, siempre buscaba las buenas historias y aventuras, y esta era una buena oportunidad para saber un poco sobre ello.
Hebihime · 31-35, F
La energía explosiva le afecto también a ella, su vestido y cabello se desarreglaron mas no por ello intento arreglarlo, se quedó mirando al muchacho alejarse a toda velocidad. En esa soledad aprovecho para estrujar su pecho con molestia, enfado y hasta un berrinche, ¿por qué no se había atrevido a decirle?—

Eres una torpe, Hancock...

Con los ojos llorosos tironeo los bordes de su manga y tiro de este para contener el llorar de verdad, le afectaba más de lo pensado haber desperdiciado su oportunidad.

Así se quedó unos segundos y luego encaro la puerta tras avanzar y traspasar la cortina, iba a seguirlo, por supuesto que a su ritmo, no perdería su elegancia en una carrera así.

Tardó algunos minutos pero finalmente lo alcanzó y al estar ahí chasqueo sus dedos ordenando que prepararán su barco.
User1578325 · 22-25, M
Con las palabras de la emperatriz que representaban su buena voluntad en asistir al entrenamiento, el pirata de goma alzó los brazos al aire con los puños cerrados y con esa fuerza en su voz exclamó:

— Entonces... ¡¡¡VAMOS!!!—

Sin esperar a nada ni siquiera a Hancock, salió disparado como un proyectil y corrió hasta las costas de la isla, sabía perfectamente el camino. Pasó tan deprisa que algunas de las amazonas sintieron la brisa en sus cuerpos, también afectó algunas actividades y causó ciertos destrozos, pero al tratarse de él era perdonado.

Cuando llegó a la costa se quedó mirando al mar, por supuesto, no había un barco preparado aún.
Hebihime · 31-35, F
Ella si recordaba a la perfección como Rayleigh le exigió no interferir con el entrenamiento de Luffy, pero ¿a quién le importaban las palabras de ese anciano decrépito? su voluntad como emperatriz era más valiosa, así que si ella quería ir a ver su entrenamiento iría así tuviera que golpear al mismísimo diablo.

¡Me encantaría ir! T-Te veré desde lejos para no interrumpirte...

Aunque al final, sí quería que él se superara así que no iba a inteferir tanto como hubiera querido, se conformaba con estar presente para apreciar el suceso.

Aunque si necesitas algo no dudaré en auxiliarte, es lo que una buena esposa haría.
User1578325 · 22-25, M
No comprendió el silencio que hubo entre su petición y lo que salió de su boca, le parecía que había demorado tanto en decir algo que lo haría sin necesidad de pedírselo, por lo que una mirada de duda se quedó fija en el rostro del Sombrero de Paja.

— ¡No necesitas ni pedirlo! —

Exclamó con esa fuerza en su voz tan propia del próximo Rey de los Piratas, y entonces siguió comiendo, aunque ahora fue él quien se atrevió a proponer un plan.

— ¿No te gustaría ver un entrenamiento de Rayleigh y mío? ¡Tú también dominas el Haki! ¡¡¡¡Será emocionante!!!!

Ignoraba el hecho de que el Rey Oscuro le había pedido que no hiciera acto de presencia en la isla del entrenamiento, por ello Luffy tan campante lo solicitaba.
Hebihime · 31-35, F
Mantuvo la valentía al pensar en lo que quería pedirle y a decir verdad, cualquier hombre al ver esa expresión suya decidida habría empezado a temblar pero como siempre, en Luffy no tenía efecto alguno, al contrario, conforme pasaban los segundos era ella quien iba perdiendo la compostura, como si se volviera de gelatina al instante.

Su boca fue deformandose hasta hacer una curva de total derrota, esa inocencia era demasiado para ella, no había manera de corromperlo para que entendiera sin palabras sus deseos y a decir verdad era tan puro que incluso a ella se le quitaban las ganas de pedir esas cosas.

S-Solo... no dejes nada sin comer...


User1578325 · 22-25, M
Se emocionaba por la promesa de esa carne especial, seguro era carne de rey marino del Calm Belt, extraña y enorme, y que podía conseguirse "fácilmente" en Amazon Lily por la cercanía con ese cinturón marítimo plagado de Reyes Marinos.

Mientras en su boca se formaba más saliva, él devoró las frutas sobrantes, y en ese momento miró con extrañeza a la emperatriz pirata.

— ¿Mh? ¿Qué es lo que necesitas Hancock? ¿Quieres que te ayude con los Reyes Marinos? ¡Será emocionante!—
Hebihime · 31-35, F
Cerró sus ojos dándose un pequeño golpecito en el pecho como quien representa una flecha que le acaba de atravesar el corazón, cada expresión y gesto que Luffy hiciera así fuera de manera cómica o seria a ella le robaba el corazón.

Sin demoras hizo el movimiento con su mano libre para que las jóvenes corrieran a conseguir la carne que ella ya tenía en reserva, nadie podía comer de ese almacén excepto el sombrero de paja.-

La traeré de inmediato... aunque también me gustaría pedir algo.

Sonaba demandante pero por dentro de sentía pequeña y muerta de pena.
User1578325 · 22-25, M
Eso esh.. másh que shuficiente...

Habló con la boca llena, mientras más trozos de fruta quedaban cerca de sus labios, pequeños fragmentos y semillas habían quedado en su piel de goma dándole un aspecto infantil y despreocupado.

El ser de goma tenía sus ventajas a la hora de comer, parecía un depósito de alimento sin fondo.

¡Con esto recuperaré toda mi energía! Aunque un poco de carne no estaría mal. Shishishi

Miraba a Hancock con una sonrisa de pura alegría, no se sabía si era por la comida o por contar con su compañía.
Hebihime · 31-35, F
No pensó que se despertaría con el puro olor... claro debió haberlo intuido, se trataba de Luffy y su insaciable apetito. Formó una mueca de disgusto con la boca, nadie la vió por estar de espaldas a la puerta a demás de que tampoco era tan comprensible por qué le molestaba el que estuviera despierto; deseaba seguir sirviendole de apoyo a su descanso y ahora era imposible.

Resopló para relajar su enfado, el permanecer así sólo iba a provocar uno de sus berrinches y sabía de sobra que no tenían efecto en Luffy (?), más le valía recobrar la compostura para disfrutar de la nueva situación: Un Luffy regordete.


¿D-Deseas otra cosa? Sólo pedí fruta...

Add a comment...
 
Send Comment