[code]— Espero paciente afuera del autobús a que la pequeña rubia bajara de este para irse junto a ella al interior de la escuela donde probablemente en los casilleros se encontraría con Roz y con Susie. Cuando la joven bruja bajo se aproximo a ella con una amplia sonrisa marcada en su rostro, se giro sobre sus talones para quedar frente a ella, inclino su rostro para corresponder al corto beso con dulzura que su amada le brindaba, rodeando su pequeña y fina cintura con sus manos.—[/code]

─ La media sangre sentía el peso de la carga de su secreto nuevamente haciendo presión sobre sus hombros, pero sólo a él podía contarle parte de lo ocurrido, y quizás él sin chistar aceptaría por el amor que le tenía. Resopló y sería ahora ella quién se detendría frente a él y tocaría de manera constante la mejilla de su amor, así como se pondría de puntillas para besar la comisura de los labiales de él. ─

─ El besó le hizo sonreír y no sólo eso, sino sonrojarse casi a juego con su tan conocido abrigo carmín. Con su mano libre tomó los mechones de su cabello para intentar acomodarnos torpemente debido a la timidez del momento, pero, lo cierto era que estaba más que encantada con su adorado mortal. Ése por quién, la vida de bruja podía esperar, ella quería lo mejor de ambos mundos y el castaño era claramente su ancla y fuerza a uno. Antes de bajar del autobús e ir de peldaño en peldaño, escucho lo último que pronunció su novio, detendiendo de forma acelerada y suspirando para mostrarse lo menos extraña posible. ─ Ellas no, no pueden venir ahora porque, tengo que pedirte esto sólo a ti, en el bosque Harv. Ya entenderás porque.. ─ Emitió con un hilo de voz corriendo por su garganta.

@Sᴀʙʀɪɴᴀ Sᴘᴇʟʟᴍᴀɴ: Siguió comiendo de la manzana disgustando del sabor y el jugo de esta, pudo escuchar solo el crujir de la manzana ante cada mordida que le pegaba, su mano libre acariciaba con ternura los nudillos de su novia, le intrigaba saber porque se había quedado en silenció,como siempre le daba curiosidad saber lo que ella pensaba, ella era siempre un mar de misterios por resolver, pero de lo único que estaba seguro era de cuanto la quería y le adoraba, el autobús escolar se estaciono finalmente, abrió sus puertas y los estudiantes dentro empezaron a bajar de este, dirigió su mirada a la femenina al momento exacto en los labios de ella hicieron presión en un su mejilla resonando un beso sonoro y tronado beso, sus labios se curvaron en una amplia sonrisa ante ello.─ ¿Ayudarte? ¡Oh!, claro si dime en que, con gusto te ayudare, incluso podemos pedir ayuda a Roz y Susie ─ Se levanto de su asiento, camino saliendo del autobús, bajo los escalones y espero abajo a la chica.─

[code] ─ Su vista se paseaba por el fino y joven rostro del joven Kinkle, cuando se trataba de compartir aunque sea asiento para ir de camino a la escuela, pasear de la mano o ir a tomar bebida alguna a la cafetería, Sabrina agradecía poder deciacar su tiempo con él, los últimos días habían sido un dolor de cabeza incesante, lleno de dudas y las voces del aquelarre hablando de ella y su linaje. Asintió, y luego escucho la sinfonía del crujir de la manzana al él darle la primera mordida, el como movía sus mejillas para degustarla y esos pliegues que rodeaban la sonrisa del castaño que lo hacían aún más encantador. ─ Genial, porque, pensaba en algo.. Que tendrás que ayudarme. ─ Repusó con tono endulzante e inocente pero claro, aún con ese misterioso toque, al que seguro Harvey ya se había acostumbrado, antes de que la culpa por borrar su memoria se apoderará de su mente una vez, todo se despejó al recibir el cálido tacto brindado por los labios del castaño contra su mejilla; La híbri

[code]━Había momentos en que se preguntaba que pasaba por la mente de la rubia quien parecia perdida en sus propios pensamientos, aveces intuia que parecía ocultarle algo, pero prefería no fijarse en ello, desde que comenzaron a salir había repetado la privacidad de la sangre de bruja y mortal, sus orbes se dirigieron a la bolsa de papel en las piernas de la rubia, quien no demoro en sacar una roja y brillante manzana, él mortal la cogio al instante en que la impropia se la otorgo. ━ ¡Gracias!, en verdad que se ve jugosa y apetitosa. ━Afirmo el castaño llevando la manzaba a su boca para pegar una mordida a esta y saborearle, tras pasar el bocado respondio a lo dicho por la hibrida de melena rubia. ━ ¿Ir al atajo del bosque?. ¡Ah claro sí!, terminando clases podemos ir a el Brina.
━Afirmo el adicto a los comics acercandose a la bruja para dejar un beso como la caricia de una hoja en el pumulo rosado de ella. ━[/code]

[code]
¿Algo mejor que las mañanas frías en Greendale a las que Ya estaba acostumbrada?, sí, la sonrisa de Harvey. Parecía que él le daba esa fuerza, ese soporte en momentos que lo requerían. Y desde la luna de sangre, vaya que necesitaba de él. Se perdió un momento, dejando ver nuevamente esa expresión; Con ambas cejas casi juntas debido a su leve nariz arrugada. ─ Eh, ¡Sí! ─ Sonrió volviendo en sí, y con la bolsa de papel en mano, sacó una roja y casi perfecta manzana.─ ¿Crees que, después de clases, ¿Puedas acompañarme a ese atajo en el bosque, Harvey? Necesito ... ir.

@Sᴀʙʀɪɴᴀ Sᴘᴇʟʟᴍᴀɴ: [code] No para nada. ─Señalo con su índice al autobús escolar que se estaciona exactamente frente a los adolescentes.─ Justo a tiempo. ─Respondió con una sonrisa a la pequeña sangre de bruja y mortal, subió las escaleras del autobús en cuanto la chica de melena rubia termino de subir, le siguió al asiento de siempre, le miro al instante de escucharle, negó con su cabeza.─ Hoy no desayune, tuve que salir mucho más temprano de casa antes de que mi padre despertara. ─Una ligera mueca se formo en los labios del mortal, pero luego cambio esta al instante de mirar el brillo en los ojos de la pequeña híbrida de la que estaba perdidamente enamorado.─ Las manzanas suenan ¡Exquisitas Brina![/code]

¿Tarde mucho?
─ Diría al subir los escalones del autobús ayudada por el mortal, al mismo tiempo que buscaba el lugar de todas las mañanas; cuatro asientos del lado del conductor y ella la ventana. ─ Sí, mis tías... Además tampoco podía salir desarreglada.─ Soltó una risa breve que se sustituiría por una sonrisa para él. ─
¿Qué tal tu mañana, ya has desayunado? Porque sino, traje unas manzanas y algo de, ¿barras de ese... novedoso "cereal"?

¡Brina! -Grito con alegría exclamando el nombre o mejor dicho aquel nombre resumido siempre le parecio adorable llamar así a la pequeña bruja.- Pense.. Pense que no vendrías. ¡Oh entiendo!, ellas solo quieren cuidarte. -Afirmo el mortal; por suerte el autobus escolar no tardo en llegar, el joven castaño se apresuro a tomar la mano de la hibrida subiendo al autobus rumbo al instituto de Greendale.-