sólo entonces te das cuenta del verdadero valor que tiene. Las acciones respaldadas por una buena causa son aún más poderosas respecto a aquellas que carecen de la misma –Reabre los ojos, contemplando el horizonte, al astro rey agonizar entre montañas en medio del manto naranja que pronto habrá de ser reemplazado por la tiniebla nocturna– Y eso es lo que me ha llevado a éste punto. Ahora, como Shaman King, he de hacer todo lo necesario para asegurarme de que el mundo transite por el buen camino. Pero no puedo negar que mi deseo sigue siendo un tanto egoísta… –Sujetando con más firmeza su mano, su mirada vira hacia la chica, a quien dedica una dulce sonrisa– Aunque ahora lo es por motivos diferentes
–Aun cuando él posee un amplio conocimiento forjado en algo más de un milenio, aquellas palabras de la peliplateada calaron hondo en él como si le hubiesen abierto las puertas a un nuevo mundo, redundando en una mayor amplitud de su sonrisa al ver su mano sujetada por la ajena. Él, durante mucho tiempo, vivió como un hombre escéptico a los sentimientos e incapaz de confiar en otra cosa que no fuera él mismo, pero eso ahora había cambiado gracias a la compañía de Jeanne– Así que se trata de eso. Tiene mucho sentido –Cierra sus ojos para centrar todos sus sentidos en aquel contacto, tierno y cálido, que le recuerda el por qué vale la pena proteger éste mundo– Es fácil expresar con palabras el afecto que unos sienten hacia otros, pero sólo cuando estás dispuesto a ir más allá para asegurar el bienestar de aquello que juraste proteger...
y crecentar la sonrisa en sus labios. Creyente de su propia determinación donde aquellos carentes de valor perderían la vida, depurando de esa manera ese mundo que tanto él protegía, como ella velaba ahora a su lado.
Negó con el rostro con suma lentitud, un gesto casi imperceptible. Así, dibujó en sus labios una sonrisa dulce y delicada, como el mismo danzar de sus cabellos llevados por el viento que hacía compañía a ambos Shamanes.— No, no creo que estés exagerando, es tu visión la que te ha llevado hasta la cúspide del entendimiento acerca de éste mundo y todo lo que en él se aloja. —confesó con sincera admiración, cándida en su voz y en el agarre que efectuó sobre la mano ajena, buscando una conexión más personal.—El amor suele ser sobrevalorado, como bien dices, creen que con expresarlo es suficiente, pero de entre tantos, sólo unos cuantos podrán resaltar por sus acciones ¿No es eso un medio de depuración natural? Aquellos que no echen atrás su corazón, ni desvíen sus pasos de la senda, serán aquellos que lleguen más allá, mientras que el resto... Perecerá, víctimas de su conformismo. —la serenidad con la que decía aquello podría parecer aberrante, mucho más al cerrar los ojos ...
Asertiva como siempre, mi dulce doncella -Comenta tras esbozar una sonrisa ladina que aparece nada más oír aquella cándida voz. Asimismo gira el rostro para mirar a su acompañante de níveo rostro y platinada cabellera- Pero hay quienes piensan que basta solo eso, sin siquiera hacer el mínimo esfuerzo para demostrar la veracidad de sus intenciones. ¿Crees que tal vez estoy exagerando un poco?
— Depende hacía donde esté enfocado ese amor y sentimientos. —hizo arribo en lento andar y una voz tersa y calma a espaldas del castaño hasta situarse a su costado derecho.— También puede significar la mayor fortaleza ¿No es tu amor por éste mundo el qué te ha forjado para limpiarlo de los males que le agobian, mi adorado Shaman king?
