HanielArcangel

Haniel...ya es hora de comenzar tu entrenamiento por la tierra, aquí la teoría se pierde y debes guiarte por tu propio juicio...la confusión es lo que más alberga estas tierras, pero aquí es donde todo puede ser posible si se es perseverante. Notaras que la humanidad te necesita mucho.

*Veía con una sonrisa cálida a su pequeña hermana que estaba por mostrar su valía en la tierra creada por el padre de todo. Azarias tenía encomendado darle sus primeros pasos, como hermano protector sentía ese miedo por ella, pero era parte del proceso, dejar que su hermana fuera parte de la creación*

Estás lista?

*Un gran destello verde alumbraba los cielos de la tierra, una señal característica del arcángel de los viajeros, aquella luz surcó por el horizonte hasta aterrizar en la tierra que se abrió ante el impacta dejando una especie de cráter entre el césped*

*Cuando la luz se disipo el cuerpo del arcángel se hizo presente, sosteniendo su lanza en su diestra la cual descanso en uno de los extremos en la tierra, miro hacia sus costados asegurándose que ningún ser vivo había presenciado aquella llegada, estaba en completa soledad lo cual era perfecto, ese día era importante, era el día que su pequeña hermana comenzaría su entrenamiento entre los humanos. Una gran responsabilidad pesaba en los hombros del arcángel, era muy exigente en cuanto repartir sus doctrinas y el vinculo que los unía como hermanos era una presión adicional*

Haniel...ya puedes aparecer.

*Con una voz grave invoco la presencia de su hermana, esperando que acudiera al llamado y de esa manera comenzar las lecciones que marcarían la vida de su hermana, sus talentos serian probados y la teoría solo quedaría en el pasado.*