Sí, claro, ¡primero me embarazas y luego huyes! ¡Debí saber que eras de esos desde el principio! —Gritó aquella mentira, fingiendo lloriquear y exagerando todo tipo de ademanes con las manos—
Puede ser que tengas cara de actor y cuerpo de... —mas no puede terminar su frase, pues exagera sus jadeos al verle fijamente, hasta que se abofetea a sí misma y niega rápidamente con la cabeza— ¿Ya volviste para siempre?