¡VA A LLOVER! —Chilló de felicidad, incrédula por la respuesta del mercenario. Saltó hasta él, literalmente se le trepó encima para que la cargara en brazos (su peso no supondría nada para él).— ¡Entonces vamos a mi consultorio! En el camino podríamos planear cómo conquistar al mundo. Gotham es muy pequeña.
¿Quién dijo que era veneno? ¿Quién dijo que era para humanos? —Sólo se olvidó de sonreír, porque estaba muy concentrada en la jeringa. Le dio un par de golpecitos con su dedo medio. La sonrisa maliciosa apareció en sus labios, expandiendo sus comisuras cuando salpicó la gotita de líquido verde radiactivo. La arlequina dio un sobresalto, evitando a toda costa el contacto con el líquido.— ¡Listo! Sólo sentirás un pellizco.
se que nome dolera . soy himune a los venenos humanos -trasnforma sus brazos ententaculos rompiendo las sujeciones se la lleva a un lugar mas privado a la -
Purrrrrfect! —Ata las muñecas del pelirrojo con unas cuerdas de cuero a los costados de la camilla, y de su bolsillo extrae una jeringa con una calavera impresa.— ¡Esto no te dolerá!
