Un pinchazo de curiosidad la invadió cuando noto que la mascará de su adverso amenazaba con aflojarse más. ¿Quizá nunca se la quita en compañía de alguien?

Oh. Una pena sería ya que necesitaría su opinión sobre la tarta luego de comerla.

— Vaya con cuidado, товарищ. ¡Esperó verlo pronto! — Se despidió al mismo tiempo que lo observaba su adverso partir hacia el lado contrario.

Ah, finalmente. Un encuentro agradable por la noche. Pensó, quizá debería salir seguido y ser diurna. Así como él.

@Anya Mikhasevich:
Nuevamente aquella reverencia se hizo ver mientras ahora, tomaba la copa del sombrero con la izquierda ¡Algo común en su comportamiento diario propio! Tras volverse a colocar el sombrero, este asintió siendo notable por el como aquella máscara que llevaba se movió. Guru de su parte hizo un pequeño gesto con su mano.

— Lo tendré en cuenta. — Mencionó en lo que arreglaba la posición del sombrero, al "acabar" este siguió con la yema del índice y el pulgar, la zona más fina del mismo solo para bajar rápido la mano. — Nos veremos pronto, Madame, he de partir ahora sí. Le invitaría a cenar pero no sé si tendrá asuntos pendientes. Si desea acompañarme, es libre totalmente. — Bajó levemente la cabeza en lo que daba la mitad de una media vuelta... ¡Una cuarto vuelta! Suena Mal. Solo viendo a través de los glases de los lentes que poseía la máscara brindando una "última" mirada por lo que correspondía a esta noche.

— Cuídese —

Miró la actuación de su adverso completamente embelesada. Incluso asintiendo en el proceso como si ella aprobara su actuación. Ahora estaba segura de que él no se equivocaría. — Точно. —

— Нет нет. Las visitas diurnas no son problema para mí. Y ahora menos al saber que vendrá a cierta hora de la noche. Solo tenga muy en cuenta lo que ha practicado, да? —

La poca clientela no era su problema sino la clase de personas que la visitaban. Para cada uno tenía una especie de ritual. Un toque solía avisar que se trataba "hacer limpieza o cobranzas" Dos toques podría ser lo mismo que el anterior, pero con urgencia.

Y tres golpes o más podría tratarse de cualquiera menos de los Bratva. Quizá de Dimitry su casero, pero el siempre gritaba al tocar.

@Anya Mikhasevich:
— Comprendo-Comprendo — Replicó ante lo último dicho por aquella dama. Guru se colocó en una posición recta mientras daba lo que podrían ser "toques" con el dedo índice al aire ¿Una practica previa? Bueno, qué podía decir, así era el. Aunque, tras quizá máximo 2 segundos de un corto silencio tras lo dicho por él mismo, este nuevamente alzó la voz en un tono más bien suave.

— Entonces mi visita será nocturna; Tres toques al timbre para que sepa que soy yo, igualmente, si era diurna podría hasta "acarrear" algún problema. — Dijo de una manera extrañamente... Curiosa, pero sin malicia. Aunque, toda aquella situación aún pese a la aparente forma extrovertida que este mantenía, la duda apareció desde el segundo uno respecto a la vida de aquella mujer ¿Tenía una segunda vida acaso? Pero, no indagó más ¿Acaso tú perderías la oportunidad de una tarta gratis por solo meter las narices en la vida del otro? No, no lo creo.

— Entiendo. Entonces nada de alergias, menos mal. — Soltó una ligera risa al ver el entusiasmo de su adverso. Era enigmático y gentil. ¿Quién no querría un cliente así?

Al notar lo que decía negó un par de veces sin dejar de mostrar aquella permanente y amable sonrisa trazada en sus labios. Aunque ahora un poco más entusiasta.

—Eso no es un problema. Casi nunca tengo "clientela" y si la hay no siempre vienen por panecillos o té. Así que siéntase con la libertad de venir cuando guste, Да. Esperaré ansiosa su visita. Si viene por la noche ve la entrada cerrada solo toque tres veces el timbre. No lo haga una sola vez. Podría confundirme. — Explicó con detalle.

@Anya Mikhasevich:
— ¡Oh! Sobre alergias puede estar tranquila. Difícilmente me disgusta un alimento y sinceramente soy alérgico a cosas bastante alejadas de la comida, asique en esa sección tiene vía libre. — Exclamó con aquel típico entusiasmo que poseía en lo que una reverencia era dada, semejante a la que los actores al final de una obra de teatro dan para agradecer al público.

Aunque claro, se alzó al ver cierto "papelito" que fue entregado con aquella mujer, el mismo lo tomó con ambas manos leyendo a través de los lentes que llevaba puestos. Un "Hm!" Fue lo que se pudo escuchar. — Entendido, mademoiselle. Una visita daré a aquella tienda preparado para hacer el intercambio ¡La fecha será... este ¿Cuándo le conviene? Lo menos que deseo es que justo cuando llegue una ola de clientela aparezca pidiendo sus pasteles. — Mencionó mientras llevaba el panfleto al bolsillo que estaba en la parte del pecho del traje.

— ¡Me alegró que acepte! ¿Alguna fruta, hierba o sustancia a la que sea alérgico? Para evitar ingredientes. — Inquirió curiosa y al mismo tiempo amable.

— Puede buscarme aquí. — Inquirió extendiéndole un pequeño panfleto. Era la publicidad de su pastelería cuya dirección estaba escrita. — El lugar está un pequeño barrio y casi no tengo muchos clientes todavía. ¡Pero me alegra que pueda venir! —

@Anya Mikhasevich:
— ¡Encantado en toda regla, Madame! El sistema del trueque jamás falla para cumplir incluso un capricho y ¡Acepto! —

— ¡Pero claro! Se ve con la elegancia y penumbra de una oscura entidad. ¡Además he leído de lo útiles que son! Si me ofrece una máscara puedo intercambiársela por algo que pueda hacer también. ¿Qué tal una tarta? ¿Le gustan los postres? —

@Anya Mikhasevich:
— ¡Finalmente alguien que entiende la gracia y estilo que te da portar esta máscara! Dispuesto me encuentro a darle el modelo de alguna ¡Los planos directamente! o llegar al punto de entregar una de las antiguas que Guru Fave utilizaba. (Obvio están limpias) —