Pudo notar como el tono de voz de la mujer era un tanto nervioso, principalmente por que siempre que terminaba de hablar mantenía una sonrisa en los labios, por lo que este parpadeó un par de veces y dejó salir una risa de sus labios, quería que la chica se sintiese cómoda, por lo que su mirada pasó de ella hacia aquel pokemon que ella guardaba en su respectiva pokeball.

—Es difícil adorar algo cuando vas al menos 3 veces al año a escuchar el mismo discurso del abuelo. Pero ver nuevas personas que les encantan los pokemon, sin duda es algo increíble.—

Escucharía atentamente lo que ella le comenta de su objetivo, por lo que afirmaba con la cabeza varias veces incluso sus ojos se abrirían ante lo que dijo sobre que ella le enseñaría la región de Kalos. A lo que él respondería con una sonrisa en sus labios.