Había pasado un tiempo de que dejó ese sueño de ser un gran maestro pokemon y se dedicó a investigar el mundo para encontrar nuevas especies, conocerlas, estudiarlas y aprender de estas mismas, había viajado en distintos lugares del mundo y no solo una vez, sino que varias.
En sus viajes conocía nuevos pokemon que encontraba, incluso capturaba alguno que otro, no solo para estudiarlos, sino para hacerse su amigo. A lo largo de sus aventuras había encontrado incluso seres legendarios, los cuales entendió que eran el equilibrio del mundo y prefirió solo dejarlos de lado. No quería causar un desastre por la humanidad.

—Phew... Nueva región... Kalos... Veamos que clase de aventuras me esperan.—

Con una sonrisa confiada en su rostro, el castaño comenzaría abordar aquel avión, notando como ya había gente, tomaría en su mano izquierda el boleto el cual tenía, buscando el lugar que le correspondería, al llegar a dicho sitio, primero subiría en la parte superior.