*Como era de esperarse, y debido a que desde tiempos remotos, tanto perros como gatos por su naturaleza y ser considerado algo así como enemigos naturales el uno del otro, es que al escuchar los ladridos del can, que amenazaba con amedrentarlo*
*Se podía sentir cierta tensión entre ambos animales, mientras el felino amenazadoramente se le erizaba la piel y pelaba los dientes hacia el otro animal*