— それは嬉しいですね、お嬢さん。*Le sonrió con amabilidad y entrego aquel peluche de gran tamaño a la pequeña.*

—どうもありがとう。— Extendió sus manos para tomar al osito que resulto ser bastante grande pero con una sonrisa encantadora, por estar feliz.

*Le sonríe de una manera diferente, mostrando su blanca dentadura* — Quindi ecco il tuo orsetto e il tuo nuovo amico.

𝑳evanto la mirada asintiendo mas de una ves a su propuesta, al parecer y pese a que no lo dijo entendió su mensaje. — Si eso quiero por favor y gracias.—

*Suspira un poco y niega despacio* —Veamos, puedo regalarte el oso y ser tu amigo si eso deseas bambina.

— Esta bien que le des la cajita pero yo ya elegí.— Es bastante testaruda al igual que un infante parecía no tener intenciones de soltarlo, aunque de ves en cuando miraba al oso. — Yo no quiero a un hombre., quello che voglio è Flavio perché lui è Flavio.— Lo apretó un poco dejando su frente contra su pecho.

*Soltó una carcajada franca, no esperaba que la pequeña hiciera eso, se inclinó un poco y le dió un par de palmadas en la cabeza* — La cajita ya le pertenece a la señorita de allá y si quieres puedo darte el enorme oso, no sé para que una pequeña niña querría a un hombre, no sé hacer tareas del hogar (?) *Miente, si sabe*

𝓕ijo sus amatista en el, avanzando confiadamente y le abrazo volviendo el conjunto de tres opciones en una. —Ho già scelto.—

— Solo un bambina. *Sonríe a la pequeña* Elige sabiamente.

— Potrebbe essere un anello con un enorme diamante, o forse il dito di qualche nemico... *Sonríe de forma extraña*