"Todoroki-Kun ¿podrías prestarme por favor tus apuntes? Me he quedado un tanto atrás y pensé que ya es hora de ponerme al corriente ¿Cuándo te desocupes me ayudaras?"

Han pasado alrededor de dos semanas llenas de practicas y hartos trabajos. El tiempo en la escuela los consume a tal grado que solo piensan en comer y descansar. La cama se había vuelto egoísta y la mesa donde el pan se sirve ni se diga.

En medio del ojo del huracán apenas se respiraba la paz en el edificio A. Midoriya se recostó sobre la cama apenas disfrutando la frescura de un largo baño, entrecerró los ojos mientras sus pensamientos se encaminaban a un solo objetivo. La silueta misma de All Migth, tan lejos y tan cerca. Antes de que su pecho ardiese llamaron a su puerta. Su sorpresa fue al ver cierto nipón frente suyo dándole la pila de libretas.