━ Pues por fortuna para ti, seguirás escuchándolo cada maldita vez.

Agresiva como habitua ser, pero no frena su actuar. Cerró los ojos, jalando con suavidad, simple deseo egoista de tenerle con ella era claro.

— Es para estos momentos cuando agradezco estar viva y poder escucharte decirlo.

No sabía como definirlo, pero cada vez que le escuchaba decir esa clase de cosas, muy a su manera podia sentirse amada, cosa la cuál sin duda le hizo suspirar y mirarle con mayor encanto.

━ Es una molestia que me guste todo lo que hagas, como te veas, o como hablas.

No se niega a tener que admitirlo, mas contrario al duro modo de hablar, había incluso plasmado un pequeño beso a esos pulgares que plantaron recorrido, asimismo, el que ahora sus brazos rodearan la figura contraria ante la necesidad de una distancia menor.

— Muchas gracias... sinceramente no esperaba que te gustará, pero me alivia saberlo.

Incluso su palida tez se vio opacada por el rubor en sus mejillas que asi mismo tenia un tono similar al de aquellas rosas. Cuándo estuvo de pie, llevo con esa misma calma sus manos hasta el rostro contrario, acariciándole suavemente las comisuras de sus labios con ambos pulgares.

━ Resalta contigo, luce bien. Me gusta.

Miró por segundos, y no hubo tardanza cuando tomó la mano propia, serviría de apoyo para la menor.

— ¿Hm? ¿Esto? Es... solo un vestuario diferente ¿te gusta?

Apenas le tuvo cerca, busco estirar su diestra cuidadosamente, esperando que pudiese tomarle y ayudarla a levantarse.

━ ¿Qué juegas ahora?

Un suave acercamiento suyo, poco interés si invade espacio privado, aunque sí existe curiosidad al estilo que está observando.