*Miraría la colilla del cigarro apagarse cuando es lanzado al piso.- Por favor. -Volvió a insistir.- Solo quiero probar a qué sabe.

Mi príncipe, me regalas uno, por favor? -observaría el cigarro que posee el joven entre sus dedos y labios-

— Nunca me vi tan incentivado a corroer mi vida con un vicio, igual podemos adelantarlo ¿No? —

—Vamos Elyas, sigue fumando. Así nos veremos pronto en tu juicio.~ —

- Evelyn,... - alza su rostro para verle mejor-

— Ah, entonces creo que ya tengo a mi princesa. —Increíblemente el azabache actuaba amable con la infante, quizá por ser una niña. Así, soltó su mejilla finalmente.— ¿Cómo se llama la princesa? —

- S-si *Desvía aun su mirada, sin evitar sentir timidez y sin retirar ese rubor aún con la caricia que siente.*

— Podría ser ¿Te gustan las tiaras? —Mencionó el más alto, colocándose de cuclillas para igualar su altura, llevando la diestra al moflete de la pequeña para pellizcarlo.

- Ammmmmm yo? - menciona inocente y con ese rubor en sus regordetas mejillas-