Eso es lo hermoso de la música y del arte en general, no? La capacidad de transmitir emociones, de mover a la gente, de hacerles sentir algo... —Asintió, mirando a Eric con aprecio—. Y lo que transmites tú es definitivamente algo muy especial. —Hizo una pausa, tomando otro sorbo del mate—. En cuanto al mate, encuentro fascinante cómo puedes adaptarlo a tus necesidades y tu estado de ánimo. Quizá debería aprender a prepararlo de esa manera, nunca se sabe cuándo puede ser útil. —Le dio una mirada significativa, su sonrisa ligeramente traviesa.
Me alegra saber que mi música logra transmitirte algo positivo o renovador, creo que es a lo que aspiramos todos los amantes de la música; que nuestro público quedé satisfecho. *Parecía sumamente inspirado y radiante cada vez que hablaba del arte en general y más aun tratándose de la música. El joven músico parecía tener un brillo como reflectores en los ojos que solo pudo ser cortado de aquel pensamiento al oír la pregunta de su contrario* Bueno respecto a los mates suelo variar, digo hay días que lo necesito dulce y otros días más amargo. Y me alegra en verdad que te gusten.
— ¿Dulce, eh? Eso no es sorprendente. —Dijo mientras cogía el mate que Eric le ofrecía, sosteniéndolo con suavidad—. Hay una cierta dulzura en tu música también, es una de las cosas que me atrajo de ella. Y si eso es una extensión de tu personalidad, entonces creo que vamos a llevarnos muy bien, Eric. —Sonrió, tomando un sorbo del mate. Hizo una pausa antes de mirar a Eric nuevamente—. Hmm, esto es bastante bueno. ¿Tú lo preparas siempre así?
Bueno ehh... *Ladeó la vista mirando con cuidado el mate el cual siguió preparando, vertiendo el agua a 80 grados sobre la yerba mate suavemente preparada. Dudo de si ponerle un poco de azúcar para que la experiencia de su compañero fuese más agradable, pero tomo en cuenta sus preferencias y simplemente dejo una pequeña cucharadita del endulzante antes de echar el agua* espero te guste....y respecto a tu pregunta, pues suelen decir que soy dulce (?)
— ¿Mate? Que interesante, nunca lo he probado antes. Por supuesto, me encantaría probarlo. —Se acercó un poco a Eric, reduciendo el espacio entre ellos—. En cuanto al sabor, creo que me gustan las cosas un poco... amargas. ¿Y tú, Eric, eres dulce o amargo? —Preguntó con una sonrisa juguetona y seductora en su rostro.
Bueno me alegra que sea por cuestiones relacionadas al Arte *Expreso el pelirrojo estando aún un poco nervioso, sacando su confiable mate y pava con agua caliente* Quieres uno?. No sé si lo prefieres amargo o dulce...
— Oh, no te preocupes, no soy un depredador, solo aprecio el talento cuando lo veo. —Dijo con una sonrisa encantadora—. Y parece que tú tienes mucho de eso.
