—¿Quién me empujó e hizo que se cayera, eh? No intentes quitarte el tiro, es obvio que fue tu culpa.

— Te costó caro, dirás, tú derramaste tu jugo apestoso en la lap por no querermela prestar (?)

—Me parecerá bien. Esa desesperación por la tarea te costó muy caro.

Siguió a la rubia, esperando a ver cuánto dinero le daría.

Hasta mal consigo misma se había sentido, e incluso se encogió de hombros al sentir como si hiciera mal. — L-Lo siento, Enthon. Yo...— pensó rápidamente — ...¿Qué tal si... Vamos a escoger tu nueva compu? Así no estarás enojado conmigo y podrás reírte un poco como antes.

—Todo este tiempo he respetado que le hables, yo no sé lo que pasa por tu cabeza...., Pero cuando yo lo veo no dejo de pensar en eso.

Para mostrarse fuerte apartó el rostro, fijándose en un punto remoto de la habitación. Trataba de reprimir sus recuerdos, para no mostrar debilidad. —En fin —dijo en un suspiro—. Lo mejor será pensar en qué haremos ahora.

Se quedó un momento callada, balbuceó un poco y luego negó — No...No podría. Tienes razón...no he sido muy comprensiva contigo...

—Por su culpa ellos murieron, Maddy. No puedo perdonarlo. ¿Perdonarías a alguien sí fue el responsable de mi muerte?

— Enthon, vamos...Ya verás, en algún momento te caerá bien, amigo. — palmea su hombro —

—Imposible —respondió tajante—. Anyel no puede ser perdonado, tienes que recordarlo.

— Yo creo que deberían de dejar esa enemistad. Deberías tratarlo un poquito más, es buen sujeto así como tú también lo eres.