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[code]— Hoy es un buen día para ir de exploración, necesito investigar sobre las ruinas que están en medio de la nada, creo. — Pensaba el hombre de 25 años quien era un profesor de historia, quería saber más a detalle de aquellas ruinas pues quería que sus alumnos de clase hicieran una investigación sobre ellas.
Se llevo todo lo necesario para una salida a lugares lejanos, linterna, agua, un poco de comida, baterías y un jabón, nunca se sabe si se necesita un baño.
Lista su mochila, tomo el primer panecillo que encontró en la cocina y salio de casa directo a las ruinas, se guiaba por el GPS que tenia su teléfono, primero tenia que tomar el tren para luego tomar un camión, otro camión y al final ir caminando aproximadamente 10 km o hasta que vea las ruinas, iba a ser un camino largo, pero no imposible.
Espero el tren aproximadamente una hora, en eso tuvo la oportunidad te fumar un poco y beber café (lo que tanto ama),
en todo el camino se la paso dormido para reforzar su batería, no quería estar cansado, por fin el tren paro y el como si hubiera sabido despertó de aquel sueño profundo, se limpio sus ojos y se levanto para tener que esperar media hora al único camio que pasaba por aquella ruta, en lo que esperaba tuvo que aguantar la platica de una anciana que solo habla de como sus gatos hacían mierda por todo su hogar, su salvación llego antes de que la anciana dijese como limpiaba el trasero de sus gatos. — Ah, fue una gran platica señora, pero debo irme. — Hizo reverencia y sin más se subió al camión aliviado, pero su suerte no fue del todo buena pues el único asiento que había era a lado de un hombre con gran peso, un pequeño tic comenzó en su ojo, tuvo que sentarse pues no iba a estar parado una hora, cuando se sentó apenas cabía, en el camino el hombre no dejaba de recargase en el haciendo que se despeinara más de lo normal.
Así estuvo hasta que llego su parada, con gran felicidad se levanto aventando la cabeza del tipo con sobre peso, salio algo torcido, dio un estirón y comenzó su caminata hacia las ruinas las cuales no estaban tan lejos como pensaba, tan solo camino un poco ya las veía a lo lejos; para el no era mucho camino aproximadamente 9km hasta llegar a su destino ¿Con que clase de criaturas se iba a encontrar? No lo sabia y ¿como se iba a defender de ellas? Tampoco lo sabia, hasta ahora pensó que lo que estaba haciendo era un suicidio, pero no había marcha atrás.

Cuando por fin llego su sorpresa fue tan grande que no podía cerrar su boca, eran ruinas hermosas y demasiado antiguas, algunas ya eran parte del bosque pues arboles y flora salia de ellas, el chico comenzó a sacar algunas fotos, después de disfrutar de las maravillas y sacar fotos se dedico a investigar, saber por que estaba ahí y si había algún rastro de algún ser que vivió ahí, para ello decidió entrar a una ruina oscura y algo tenebrosa, para eso tomo su linterna prendiéndola, no se veía mucho, pero por lo menos podía ver por donde caminaba.
— Este lugar es fatasti... — Se detuvo en seco cuando escucho un ruido, una voz, una presencia, aquello hizo que su sangre se fuera hasta la cabeza, era imposible que alguien estuviera ahí dentro, trato de calmarse y poco después siguió su caminata tratando de convencer que aquello fue parte de su imaginación, sin embargo, otro ruido hizo que cambiara de parecer, se volvió loco, empezó a apuntar la linterna por todos lados esperando ver algo, pero no veía nada. — Si eres tu "eso" debes saber que no soy un niño, soy un adulto, y... n-no tengo miedo. — Aunque se cagara de miedo jamas perdería su comicidad, lo anterior dicho fue por que hace unos días atrás había visto aquella aterradora película.
Esperaba alguna respuesta, pero al mismo tiempo no quería que alguien le respondiera.[/code]