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[code]Su carrera se vio interrumpida luego del súbito encuentro con el desconocido. muy a su pesar, Chifuyu observó y escuchó la disculpa del extraño mientras se quejaba entre dientes. ¡No tenía tiempo que perder! No dejo espacio a más cuando de pronto volvió a encarrerarse hacía el sitio que tanta prisa tenía por arribar.

— ¡ . . . 💢! —

Unas horas antes se encontraba vagando por los alrededores del barrio, cerca de su hogar yacía un pequeño parque. Chifuyu había pasado con anterioridad por aquel sitio y visto a una pequeña gatita ir de un lado a otro, pasó días observándola desde la distancia y poco a poco fue acercándose a ella para habituarla a su presencia, cuál fue su sorpresa cuando descubrió que la felina había dado a luz a unos diminutos gatitos de colores grisáceos. Paso los días siguientes visitando a mamá gata para ayudarla a alimentarse y proteger a los pequeños en una casa improvisada que logró construir con pedazos de madera, metal y plásticos que halló en los vertederos de la zona.

Los gatitos no tardaban en crecer lo suficiente para ponerlos en adopción, sin embargo y después de continuas búsquedas, Chifuyu finalmente había encontrado una asociación encargada de proveer atención a animalitos en situación de calle, por lo que, aquel día se disponía a recoger a la familia para llevarla al refugio.[/code]