* siempre se había mantenido desde las sombras observando les llamaba mucho la atención ir al mundo tu mano sobre todo el observar de lejos A aquél rey que cuidaba la Tierra siempre le habías mirado y le llamaba la atención sus facciones y su manera de tratar a los demás pero jamás había llegado a escuchar la voz del mismo dirigiéndose a ella*
Bue... Bue... Buenas...
* fue la única palabra que apenas logró articular con aquel tono de voz tan suave y melodiosa la princesa de la luna había quedado fascinada Al escuchar el timbre de voz directamente hacia ella que no supo cómo reaccionar en ese momento sus manos se apretaron a los lados de aquel vestido que portaba*
*¿Que fragancia era esa? ¿Porque nubla los sentidos y acelera el corazón? Preguntas que no serian contestadas solo en su imaginación. Su curiosidad solo seria saciada al encontrar el origen de aquel aroma. Sus pies se movieron buscando encontrar el camino que le guiara a la dueña, por suerte, su recorrido fue acertado entonces allí estaba, su rostro de porcelana, sus ojos radiantes y llamativos, sus cabellos que caían como cascada, la luna y la tierra encontrándose y llamándose con los ojos por algunos segundos. Fue hasta que el silencio se rompe con aquella voz varonil que se materializa el encuentro*
*su mirada se desvió conforme avanza cada vez más, el corazón latía deprisa y sus piernas temblaron cuando se cruzó de frente con aquel albino, sus ojos celeste se abrieron de par en par y los labios se contrayeron*[image removed]
*Una larga caminata parece ser una formula perfecta para aclarar la mente. No obstante ese día se presento una inquietud que no era comprendida del todo por aquel soberano., un presentimiento conectaba el corazón y la mente como el preludio que algo estaba por cambiar su vida*
*aquella joven observo algo curiosa y confusa si aquel albino era quien imaginaba, su respiración estaba algo agitada y sentía como si el mundo le caía encima*
