Cierra sus ojos en cuanto es separado de aquel beso, mordiendose el labio inferior y elevando su pecho gracias a aquellos besos y lamidas que ahora recorrian la parte superior de su cuerpo. Su cintura era un lugar bastante sensible en su cuerpo por lo qu las continuas caricias le tenian con un leve movimiento de estas que hacia que se frotaran contra las ajenas

-Si... lo soy...

Comenta con una suave sonrisa e el rostro, aunque el sonrojo era bastante llamativo, sus manos bajando en su recorrido por el torso ajeno hasta caer en el borde de sus pantalones, abriendole el cinturon y luego el cierre para deslizar la mano dentro de la prenda y poder comenzar a estimularle por encima del boxer

-Estas duro...

Susurra, no sabia que era lo que le sucedia, solo sabia que deseaba a aquel hombre, ahi y ahora.

La manifestada iniciativa del peliverde en esos besos y abrazo fue tomada por sorpresa por parte del pelinegro, el cual no opuso resistencia a esas muestras de cariño, correspondiendo a sus besos.

Pasados unos segundos, se separó de los labios de su amado para recorrer con besos la piel de su hombro y pecho, mientras no cesaban sus caricias por sobre las caderas y cintura del menor, haciendo que el espacio entre su pelvis y la de Viktor se mantuviesen lo suficientemente unidas como para sentir ese exquisito roce entre sus cuerpos.

-Eres mio... -Le susurró con sensualidad, en el momento en que sus labios y lengua estimulaban con besos, lamidas y chupetes el vientre y estómago de Viktor.

Su cuerpo tiembla un poco al sentir las calidas manos de drake sobre su torso, mordiendose el labio inferior y suspirando bajo. Corresponde al beso sin chistar, caminando hacia atras hasta que la parte trasera de sus piernas choca contra el sofá de la oficina, doblandolas suavemente en lo que se dejaba recostar sobre el mueble por su pareja.

No parecia querer separarse tampoco de aquellos labios, pero tambien necesitaba respirar, cruzando miradas con el pelinegro y sonriendole suavemente. El estar tan cerca de el le daba algo de verguenza aun, justo como el primer dia que se besaron por primera vez. Traga en seco al ver el ahora desnudo torso del mayor, soltando un leve suspiro y recorriendole suavemente con la punta de sus dedos

-Drake... eres tan sensual hehe

Rie cerrando los ojos, abrazandolo contra si no importandole que su peso estuviera sobre el, besandole nuevamente y esta vez de forma mas pasional

Diablos... -Murmura en voz baja ante la afirmación de su amado, mirándole a los ojos cautivado por la belleza y erotismo de Viktor cada vez más perceptibles para él.

Aprovechó la desnudez del torso y espalda de su amado para abrazarlo y rozar la yema de sus dedos sobre esa pálida piel de su amado, besando sus labios y guiándolo hasta el sofá que estaba casi cerca de la entrada a la oficina, recostando con delicadeza a Viktor sobre esta, si separar sus labios de los suyos durante ese proceso.

Pasados unos cortos segundos, deja de besarle. Pero contempla esos ojos verdes del menor estando a escasos centímetros de distancia de su rostro. Usó sus manos para también despojarse de su prenda de vestir superior, dejando al descubierto su torso. -Viktor...

-al ver la insistencia de las manos de Drake en tocarle directamente, lleva sus dedos al borde de su prenda superior, retirandola por encima de su cabeza y volviendo a abrazar el cuello del chico oscuro, cruzando miradas con el- Tienes razon... -su sonrojo se hace visible con sus ultimas palabras y la forma en la que las dice, mordiendose el labio inferior frotando su nariz contra el cuello ajeno- Respondele entonces... ven a mi... Drake...

Claro...¿Qué nos detiene? -Le cuestiona con amor, llevando ambas manos por debajo de la prenda superior de su amado y asi acariciar su espalda directamente, mientras le miraba a los ojos. -Es nuestra oficina y nadie puede entrar acá a menos que lo autoricemos. Además... -Se acercó con sutileza hasta su oreja, esbozando una ligera sonrisa seductora. -El aroma de tu piel me reclama...

Drake... te deseo... -le susurra ahora subiendo hasta sus labios para poder besarlos, tomando sus mejillas y acariciando estas, sus caderas alzandose y su espalda arqueandose ante aquel toque, bajando a presionar un poco su pecho con las manos- Podemos en serio?...

Mmmm...Viktor... *Le aprisiona entre sus brazos, permitiéndole esas mordidas y besos en su cuello. Entre esas caricias a la espalda de su amado, llevó una de sus manos por debajo de la ropa de este para acariciar su espalda, mientras utilizó su otra mano para acariciar y masajear los firmes glúteos del peliverde, gruñendo entre los mimos recibidos por el contrario.

-al encontrarse en la privacidad de su oficina se separa de el un poco, mirandole a los ojos de forma algo juguetona y empujandole bien contra la puerta luego de cerrarla, pasando a su cuello para dejar suaves mordidas y besos en este-

... -Mientras se besaban, el mayor buscaba a tientas el picaporte de la puerta de la oficina que ambos compartían, logrando abrirla y entrando a esta, sosteniendo de la cintura a su amado durante esos besos, cerrando la puerta tras de sí.