De pronto el éxtasis recorrió su cuerpo cual satisfecha espectadora aunque tan solo fuese el comienzo de su entretenimiento. Una vez más y a la brevedad con esa seguridad que tanto le caracteriza tomó asiento en aquel sillón sumamente cómodo detrás suyo y contiguo cruzó ambas piernas.
Paso saliva entonces, recuperando poco a poco la respiracion, o casi en su totalidad, pues su pecho seguia elevandose bastante, ahora buscando mas aire del basico, necesitaba relajarse urgentemente.
Tras escucharlo curvo los labios definiendo una sonrisa triunfante y asimismo retomar la postura imponente frente a él contemplando ese encantador espectáculo ofrecido.
Claramente estaba mas que intimidado por las palabras de la mujer, asi que una accion como ella no fue respondida hostilmente, de hecho solo pudo respirar ligeramente agitado.
Al segundo accedió a la petición tras levantarse de su cómodo asiento y tan solo basto elevar su pierna cerca del torso varonil y posterior finalmente pisarlo.
