—Ella no tenía idea que no iban a pagar nada de eso, pero igual no necesita comer mucho para llenarse, ya que de por sí es pequeña de tamaño, al terminar la hamburguesa se sintió realmente llena y reclinó su cuerpo hacia atrás.—
Ahnyaaa~ Que rico comí... Y-Yo no sé como me gustan los chicos, nunca he tenido pareja, ni novio, supongo que me gustaría que me trataran bien y me dieran comida. (?)
Piden y piden de comer ya que al final no van a pagar nada, por ello es que están pidiendo a manos llenas. Aunque a su manera hace lo que cree es correcto, le da una mordida a sus nuggets de pollo para después contestarle.
— Me da igual el color de pelo que tengan, además no me atraen las rubias porque me recuerdan a Toga.
Haciendo la mano de un lado a otro, en señal de que no necesita le compensen lo que está haciendo ya que su paga será que tengan energía para salir corriendo y no los atrapen.
Bueno, como decías que me tiña el cabello de negro o rubio, pensé que te gustaban las chicas así.
—Comentó la joven felina, al oírle decir que podía pedir lo que quisiera, sus ojos se iluminaron, pese a lo adorable que puede parecer, no era tan común que la gente tuviera gestos de amabilidad con ella, algunos se aprovechaban de su inocencia o su debilidad, por lo que continuó comiendo la hamburguesa que el joven le dio y tomó un poco de soda también.—
Gracias nyaw... eres amable a tu manera, ojalá algún día pueda compensartelo.~
— Tengo que tolerar a Toga, no tengo preferencia por el color de alguna chica en específico. Continuo mientras se toma unas papas y unos nuggets para comer dejando que Rosie pida lo que quiera ya que al guardar el secreto la ha metido sin permiso a la Liga de Villanos. — Come, que no tendrás fuerzas para cuándo lo requieras.
Decía que con razón no te simpatiza, yo creí que por eso te gustaban las chicas rubias como ella. —Aliviada se dejó de cubrir el rostro y suspiró, al tiempo sus orejitas descendieron y le miró de reojo con esos grandes y bonitos ojos purpuras.—
No pudo escuchar que le dijo gracias al ruido que hacen en aquel sitio de hamburguesas además de no contar con tan buen oído. — Que dijiste Rosie, no te escuché, no me dejaron oír.
