Mintió vilmente mientras le dedicaba una sonrisa coqueta a aquel joven de nombre Darien.

rápidamente aquellos jóvenes que habían decidido saltarse las clases como ella comenzaron a rodearla impresionada por sus habilidades, Mina era sumamente competitiva y más aún si había chicos guapos observando, aunque en determinado punto había dejado de prestarle atención al dueño del local enfocándose únicamente en no perder, alterándose de vez en vez, el dueño intento llamar la atención de la rubia puesto que deseaba presentarle a un amigo, Minako que ya se encontraba más que concentrada al pelear contra otros jugadores no le ponía demasiada atención, pero la insistencia del joven la altero un poco, volteo a verle y entonces la concentración de V se perdió por completo, casi de inmediato echo a su nuevo amigo hacia un costado para poder presentarse simulando ser una chica sumamente linda.

━ H-Hola. Lamento tanto no haber puesto atención antes, creo que no estaba escuchando. ━

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Las excusas de la rubia no funcionaban con Artemis, quien ya se encontraba apresurándola y saltándole a los pies cuando comenzaba a querer re acomodarse en la cama, 7:30, le mostraba el despertador aquel gato blanco de forma escandalosa, la joven vanidosa casi salta al ver la hora que era, se suponía tenía que llegar a las 8 exactamente y el pesado de Artemis no le permitía utilizar sus poderes para ir sobre los tejados. Artemis y Mina corrían apresuradamente uno al lado del otro sin embargo el chico atractivo de la tienda de videojuegos prácticamente hizo olvidar a la rubia que tenía prisa, se presentó coquetamente y se excusó con que ya no alcanzaría a llegar para saltarse la primera hora de clase y aprovechar para lucirse un poquito en un nuevo juego Battle Royaale que acaba de llegar al local.

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Japón era tan diferente de Inglaterra, pero después de haber recuperado sus recuerdos y haber combatido dúrate tanto tiempo sola como Sailor V, su misión en dicho país había terminado y debía de regresar para reencontrarse con la princesa de la Luna, aunque aún no era tiempo de conocerla, sin embargo ya debía de estar presente, preparada para cuando llegara el momento indicado de hacerse presente.

Un nuevo día había llegado y Minako corría hacia su nueva escuela de forma apresurada mientras se quejaba con el gatito blanco que reposaba sobre la cabeza de la rubia.

━ Deberías dejarme descansar por lo menos esta semana, acabamos de regresar de otro país. Me merezco dormir y adaptarme al cambio de horario. ━

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